Cortarse el pelo en casa: varios consejos para salir bien del paso
Hay muchas razones para acudir a profesionales cuando quieres cortarte el cabello, pero lo cierto es que un porcentaje elevado de la población se corta el pelo en casa. Si buscas un cambio de estilo o un corte radical, lo mejor es ponerte en manos de quienes saben del tema. Para un corte de puntas, un ligero decapado o un flequillo, puedes probar a hacerlo en casa, como Kylie Jenner, pero necesitas algunas nociones para que el resultado no sea un auténtico desastre.
Estadísticas que sorprenden
Para que un corte se mantenga vivo, lo ideal sería acudir a la peluquería una vez cada dos meses. Lo cierto es que de la teoría a la práctica va un abismo y así se desprende de una encuesta realizada por Olaplex, el revolucionario sistema de tratamiento reparador del cabello. Según se desprende de dicha encuesta, si bien el 80,2% de la población femenina sigue confiando su corte de pelo en manos de profesionales, el 12,4% de las españolas se corta el pelo sola, un 4,6% combina su corte con el de profesionales y un 2,8% confía en familiares o amigos, con independencia de si cuentan o no con nociones de peluquería.
Para ese 19,8% de españolas que no tiene miedo a probar suerte en casa, aquí dejamos unos consejos que ayudarán a conseguir mejores resultados.
Consejos generales
Antes de empezar a hablar de cortes es importante atender a una serie de consejos:
1. Las tijeras: si no cuentas con tijeras profesionales, que es lo más probable, hazte con unas afiladas, nunca te cortes el pelo con tijeras de manualidades, que no cortan, ni por supuesto con las de cocina. Empieza usando unas pequeñas, que se manejan mejor que unas más grandes.
2. El cabello: si no controlas demasiado, es mejor comenzar a cortar el cabello en seco. Si cortas el pelo húmedo, al secarlo va a quedar más corto de lo que tenías previsto. Una vez cortado sí que puedes mojarlo para perfeccionar y perfilar.
3. Los mechones: es mejor cortar poco a poco, no intentes cortar de una vez mechones muy gruesos porque te quedará a bocados.
El flequillo
Recuerda que lo mejor es hacer el corte con el cabello limpio y perfectamente seco, aunque si ya tienes la medida pillada, puedes humedecerlo. Es posible hacer tres tipos de cortes: recto, abierto en el centro o escalonado de lado.
El primer paso es separar la sección de cabello que deseas convertir en flequillo, más o menos espeso. Para hacer las guías se pueden tomar como referencias la raya central del cabello, a unos tres o cuatro dedos de la frente, y el punto más alto de las cejas.
Si deseas un corte recto solo tienes que peinar el cabello hacia adelante y cortar en línea recta. Si tienes buen pulso puedes hacerlo a mano alzada, pero también puedes utilizar como guías tus dedos índice y corazón, un peine e incluso unas pinzas de cerrar bolsas de alimentos. Otra opción es hacerte una coleta con el mechón de flequillo y cortarlo.
Si quieres un flequillo abierto en el centro lo ideal es peinar hacia adelante el mechón y retorcerlo sobre sí mismo antes de cortar. Otra opción es dividir el flequillo en dos mechones, el derecho se peina por delante de la cara hacia el lado izquierdo y se corta recto. Seguidamente se peina el izquierdo hacia la derecha y se corta del mismo modo. Así se consigue un flequillo más corto por el centro que por los lados.
El corte escalonado de lado se consigue haciendo el paso anterior con todo el flequillo peinándolo y cortándolo sólo hacia uno de los lados, el contrario al que deseas más corto.
Cortar las puntas
Lo primero, advertir es que no se recomienda hacer cortes drásticos en casa. Si quieres probar a hacerte un corte de puntas existen varios métodos.
El primer método dará como resultado una melena algo más corta por detrás que por delante. Consiste en sujetar el cabello en una coleta justo a la altura de la nuca. Con una segunda gomilla hazte otra coleta a la altura que quieras cortar y peina el mechón restante y coloca los dedos como guía y corta el sobrante en línea recta.
Con el segundo método obtienes un corte redondeado por detrás. Consiste en dividir el cabello en dos partes iguales, se sujetan ambas por delante en una coleta y repites el proceso anterior: peinar, colocar los dedos como guía y cortar en línea recta a la altura deseada.
Para que quede recto por la parte de atrás, será necesario dividir el cabello en dos partes iguales, se peinan hacia adelante y se colocan los dedos como guía en una diagonal de manera que cortes más los mechones de atrás que los de delante.
Corte a capas
La manera más sencilla de conseguir un corte a capas es con ayuda de una coleta. Se peina todo el cabello hacia adelante (si no quieres tocar los mechones delanteros, déjalos fuera de la coleta) y se sujeta muy bien con una goma de pelo justo encima de la frente. Se peina bien la coleta y utilizando los dedos índice y corazón como guía, se cortan un par de centímetros. Primero en línea recta y luego, con la tijera en vertical, desfilando un poco los mechones. Lo sueltas y trazas con ayuda del peine una raya por debajo de las orejas. El pelo que quede por debajo de esta línea ya no lo vas a tocar más, con el resto coges de nuevo una coleta en la frente y vuelves a cortar un par de centímetros. Suelta de nuevo y traza una segunda raya a la altura de los ojos. Recoge una tercera coleta y vuelve a cortar un par de centímetros. De este modo se consigue una melena a capas sin demasiadas complicaciones.Debes cortar poco a poco para evitar escalones.