La rutina diaria de ducha, tratamiento y maquillaje requiere paciencia y ciertos conocimientos, pues aplicarte las cremas por su orden puede duplicar sus efectos y lo contrario anularlos totalmente. En líneas generales hay que seguir la pauta de limpiar, tratar y finalmente maquillar y aunque no sepamos el secreto para pasar del albornoz a una foto con más de 5 millones de ‘likes’, si conocemos el ritual cosmético que debe seguir una estrella como Selena Gómez. Atenta que te lo contamos en cinco pasos.

Los básicos para un cuerpo diez sin salir de la ducha

La primera norma es empezar por el cuerpo, si lo dejas para el final tal vez no te lleguen el tiempo o la paciencia. Comienza por una ducha con gel, es fundamental que la piel esté limpia para después realizar una exfoliación que retire las células muertas de la piel. Si tu exfoliante contiene jabón podrás evitarte el gel. Si utilizas anticelulítico éste es el momento de aplicarlo: con la piel limpia, exfoliada y seca. Deja que se absorba unos minutos y sí o sí el siguiente paso es la hidratación. Deja para el final la protección solar, ésta forma una película sobre la piel que no dejará pasar nada más.

Itinerario de los tratamientos de la cara

Si no sueles limpiarte la cara con jabón el siguiente paso será realizar la limpieza de cutis, ya lo hagas con leche y tónico o con agua micelar. Si te toca exfoliar, el momento adecuado es tras la limpieza y antes del tratamiento.

Pero ¿cuál es el orden correcto en el que se aplican los productos cosméticos de la cara? El primer lugar lo ocupa el sérum: hay que depositarlo en la palma, calentarlo frotando ambas manos y aplicarlo dando suaves golpecitos por toda la cara, actúa en las capas más profundas de la piel y potencia el efecto de la crema. Después es el turno del contorno de ojos que se debe absorber dando ligerísimos toques con el dedo anular en el hueso, nunca pegado al ojo. Continúa con la crema hidratante masajeando en círculos y hacia arriba y termina con la protección solar, aunque ya existen hidratantes que la llevan incorporada. La zona del cuello y el escote deben tratarse de la misma manera que la cara con un masaje en X ascendente.

Primera fase del maquillaje: bases y correctores

Si aún eres capaz de darlo todo pasa al momento del maquillaje tras aplicarte la hidratante, pero espera un par de minutos antes de meterte en faena. Hay que comenzar tratando el lienzo, es decir, preparando la piel con una prebase, de este modo disimulas los poros e igualas el tono. Si necesitas tapar imperfecciones es el momento de aplicar el corrector: en ojeras, rojeces, manchas o granitos. Una vez preparada la piel puedes pasar a la base de maquillaje, que siempre debe ser de un tono similar al de tu piel para que no se produzcan cortes entre la cara y el cuello. Si te gusta puedes matizar la zona T con polvos sueltos y ya para terminar ilumina las partes del rostro que quieras destacar: pómulos, puente de la nariz, arco de cupido…

Segunda fase: maquillaje de ojos

Muchas mujeres se bastan y sobran con un poco de máscara de pestañas pero el maquillaje completo de ojos, especialmente si éste es tan sofisticado como un ‘smokey eye’, requiere un poco más de paciencia. Comienza aplicando una prebase de ojos, hará que tu sombra sea más duradera. Continúa con la sombra, aunque muchas mujeres prefieren usar antes el delineador para que la línea se difumine bajo la sombra (evitando de esta manera que se endurezca demasiado la mirada), lo correcto es hacerlo después. Termina con la máscara de pestañas: primero aplícala en las de arriba y si es necesario maquilla también las de abajo. El último toque deben ser las cejas, si es que necesitas maquillarlas o darle forma, pues con el ojo maquillado tendrás una visión completa del conjunto.

Tercera fase: maquillaje de labios

Aunque te sientas tentada a coger la barra y aplicártela sin más, lo correcto es tratar la piel de los labios con un bálsamo hidratante o una prebase, de esta manera corriges posibles defectos y el maquillaje de labios será más duradero. Continúa con el perfilador: primero dibuja el contorno, luego rellena los labios con el mismo lápiz y sobre éste maquilla con la barra de labios. Si quieres que el color sea más duradero colócate un pañuelo de papel para retirar el sobrante, aplica polvos sueltos y vuelve a maquillar con la barra de labios. Deja para el final el colorete, es la guinda del maquillaje y necesitas tener una visión global del resultado.

Y ahora ya estás lista, a por los 5 millones de ‘likes’.