La epigenética es una rama de la biología que estudia cómo ciertos factores externos pueden modificar la forma en que se expresan los genes. Dicho de otro modo, el ADN que heredamos no cambia, pero la manera en que se manifiesta está influenciada por el entorno, los hábitos o las condiciones ambientales.
Esta ciencia aplicada a la cosmética permite desarrollar fórmulas que se adaptan a la historia de cada piel, activando los mecanismos de regeneración celular que sean necesarios en cada caso concreto.
Suena a magia, pero la realidad es que la epigenética está en vías de marcar el futuro de la cosmética como camino para modificar el comportamiento celular y, en consecuencia, también nuestro aspecto. Lo cierto es que la genética es responsable de más del 50% del proceso de envejecimiento, pero se ha demostrado que el comportamiento celular se puede reeducar y esa es la razón por la que dos gemelos con idénticos genes pueden evolucionar físicamente de manera diferente si el entorno y el estilo de vida no es el mismo.
Para hacerlo más sencillo recurriremos a algunos ejemplos de la epigenética aplicada a la cosmética:
Uno de los laboratorios pioneros en utilizar el término epigenética fue Biologique Recherche, concretamente en la formulación de La Grande Crème. Esta crema fue considerada una innovación en el campo de la cosmética por trata todos los problemas ligados al envejecimiento de una manera global. El responsable es el el EpigenActiv©, un péptido que actúa sobre los receptores de los factores de crecimiento cutáneos y que promueve la regenerar los tejidos, refuerza la barrera cutánea, combate la flacidez, reafirma el contorno, reduce las arrugas existentes y ralentiza la aparición de otras nuevas.
Nuggela & Sulé fue una de las primeras marcas en apostar por la epigenética para luchar contra la caída del cabello y combatir problemas como el cabello graso, la caspa o el cuero cabelludo sensible. Nos centraremos en el funcionamiento del champú anticaída y para explicar su funcionamiento hay que partir de la proteína GSK-3, que es la que marca el final de la fase anágena o fase de crecimiento y el paso a la fase de caída. Aquí entra en juego la epigenética, porque ciertas investigaciones han demostrado que se puede estimular el crecimiento del pelo inhibiendo la GSK-3 y esto se consigue mediante la estimulación de ciertas moléculas (los Micro-RNA miR-26a-5p y miR-29b-3p) mediante uno de los activos presentes en la formulación del Champú.
Los laboratorios Martiderm también se han unido a la epigenética, centrando sus investigaciones en la cosmética antiedad. El resultado son sus nuevas cremas Epigence 145 que estimulan la renovación celular, potenciando la producción de proteínas como el ácido hialurónico, así como de las fibras de colágeno y elastina.
Otro programa antiedad basado en la epigenética lo encuentras en forma de Kit en Mercadona. Es el resultado de la colaboración entre el laboratorio Chantelet y el Dr. Ángel Martín, director médico de Clínica Menorca, compuesto por una crema antiedad y dos sérums, uno de día hidratante y antioxidante y otro de noche renovador y reparador.
La crema contiene proteína hidrolizada de soja y glucanos, principios que activan las sirtuinas-1 y 3, responsables de la juventud y la oxigenación celular evitando la degradación de la elastina y el colágeno. El sérum de día está compuesto por extracto de hamamelis y vitaminas B12, A y E, un complejo hidratante y nutritivo que protege la piel del estrés oxidativo. El sérum de noche contiene tiene ácido hialurónico, colágeno y sodio PCA (ácido pirrolidín carboxílico), que aportan hidratación, redensifican la dermis, rellenando las arrugas y proporcionan elasticidad a la piel.
La línea Wine Elixir de Apivita también aplica la epigenética a la cosmética antienvejecimiento. Su ingrediente estrella son los polifenoles de las hojas de Athiri, Aidani y Assyrtiko, tres antiguas variedades de uva con las que se produce el vino Vinsanto de Santorini. Estas vides consiguen activar determinadas proteínas (sirtuinas y NRF27/ KEAP1) relacionadas con la regeneración de la piel, propiciando su desintoxicación, activando las defensas, aportando firmeza, mejorando las arrugas y definiendo el contorno.