El nuevo traje de emperador, a examen: ¿mejor vestida implica más desnuda?
Habíamos visto modelitos imposibles meses atrás, pero algunos vestidos de la fiesta de Di Caprio en St. Tropez nos han dejado definitivamente en estado de ‘shock’, especialmente los de Michelle Rodríguez y Jessica Stam: dos ligeros velos bordados estratégicamente con flores. Corsés, braguitas de talle alto, forro camuflado, hay muchos detalles que acompañan al nuevo traje de emperador y que ya lucieron Jennifer Lopez, Kim Kardashian y Beyoncé en la última Gala del MET. Analizamos el ultra lucimiento de anatomía bajo las transparencias de alta costura.
Desvestidas por Francesco Scognamiglio
Igual que en el cuento ‘El traje nuevo del Emperador’ cualquiera podría haber gritado “¡pero si van desnudas!”, aunque no exactamente: Michelle Rodríguez y Jessica Stam van vestidas con la última colección del diseñador Francesco Scognamiglio y los precios de cada una de sus transparencias superan los 2.000 euros.
Es cierto que en verano los códigos se relajan, que la fiesta de Leonardo Di Caprio, además de ser para un círculo muy pequeño de amigos, se celebró en un yate en St. Tropez (ciudad de vacaciones), también que la una (Michelle) se cubrió con ropa interior tipo traje de baño ‘vintage’, que la otra (Jessica) tiene un cuerpo para ser lucido sin pudores y que, finalmente, en privado cada cual hace lo que le da la gana.
Más allá de la insinuación
Pero cuando el círculo en el que se mueven las ‘vips’ no es tan cerrado, tal vez enseñar más allá de la insinuación deja de ser sensual para convertirse en bomba sexual. Olvidemos la elegancia, que en estos casos no existe, para centrar la atención en cuál debe ser el tipo de ropa interior adecuada para mejorar tu anatomía.
En estos cuatro casos ninguna. Ni elevar, ni recolocar, ni aumentar, ni reducir es posible si el recorrido de tus prendas deja a la vista parte del culo, del pecho, toda la espalda y las piernas. No existen prendas milagrosas y totalmente transparentes, o lo tienes todo en tu sitio o te puedes ir olvidando.
El recurso del corsé
Si dentro del mundo de las transparencias quieres sentir que vas semi-tapada, apuesta por una sola pieza, ya sea una especie de corsé como el de Miley Cyrus o un body como el de Aymeline Valade. Ambos aumentan las posibilidades de resultar sexy sin necesidad de ser vulgar.
También dentro de la categoría corsé puedes encontrar prendas como este vestido de Versace, a medio camino entre el salto de cama, la lencería fina, el miriñaque y el corsé, pero que no deja de ser una ocurrencia de Donatella que sólo será usado por modelos como Rosie Hungtinton-Whiteley.
Braguitas de talle alto
Las braguitas de talle alto pueden tener doble función: por una parte evitan que vayas demasiado expuesta y por otra, si eliges las adecuadas (tipo ‘shape’), pueden camuflar pequeños defectos tanto en la zona abdominal como en los glúteos.
Es importante elegir el corte adecuado para estilizar la figura y las piernas. Si la braguita es muy ancha, de talle muy alto y su terminación en las piernas es en línea recta, la forma que lleva Alessandra Ambrosio, alarga el tórax y acorta las extremidades. Si por el contrario llevan una ligera forma curva en las piernas, las de Jessie J y Daria Strokous, el efecto es el contrario y tus piernas parecerán más largas.
Cuando la cadera es ancha
Partiendo de que estas prendas son difíciles de llevar para todas las mujeres, da igual si son delgadas o no, en caso de querer disimular unas caderas anchas la mejor idea no es usar una malla transparente con un ‘culotte’ extra-ancho como los de Kim Kardashian, no sólo no esconde nada, potencia lo que debe ser camuflado.
Para que la figura parezca más estilizada es mejor jugar con adornos opacos en los laterales del vestido que tapen justo la zona más problemática, como en los vestidos blancos de Kim Kardashian y su hermana Kylie Jenner.
El forrito camuflado
Uno de los trucos más viejos es el de usar un forro en color piel bajo unas transparencias excesivas. Para que quede realmente camuflado es mejor que el forro se ajuste a los bordados del vestido, en el caso de Chiara Ferragni el efecto conseguido es el de una combinación y no queda elegante, habría sido mejor resolverlo con un forro tipo ‘body’ como el que lleva Karlie Kloss. En el caso de Camila Alves la cuestión del forro queda mejor resuelta por quedar integrado entre los dibujos de su vestido.
Tejidos opacos en zonas estratégicas
Resolver el tema de las transparencias sin tener que ocuparte en exceso de la ropa interior o de coser un forro al vestido es fácil cuando el modelo ya se ocupa de tapar las partes de tu cuerpo que, probablemente, no estás dispuesta a enseñar. Encaje diminuto y pedrería son los recursos que utiliza el diseñador Zuhair Murad, aunque la modelo Izabel Goulart haya metido la pata con unas braguitas ¡blancas!
Otra posibilidad es combinar tejido opaco y trasparente formando rayas horizontales, perfecto para las famosas más ‘recatadas’ como Shanina Shaik o Khloe Kardashian que quieren enseñar sólo parte de su anatomía.
Las que se equivocan
A estas alturas ya nada tiene la capacidad de escandalizar, los modelos pueden ser o no objetables pero nadie se lleva las manos a la cabeza porque una ‘celebrity’ quiera aparecer prácticamente desnuda en una alfombra roja. Los tres primeros modelos, la malla de rejilla de Bleona Qereti, la evidencia de Louise Hazel y el sin comentarios de Stella Rocha son tres llamadas de atención en busca de un minuto de gloria.
El cuarto caso, el modelo de Poppy Delevingne, es un sin sentido y no por el vestido ni por el ‘culotte’, es el arrepentimiento de última hora cuando decidió tapar su pecho con un sujetador de silicona. Un sin sentido que debió solucionar con un sujetador negro sin más.