De la gomina a los trajes entallados: cinco claves del estilo del nuevo presidente de Austria
Con sólo 31 años acaba de ganar las elecciones legislativas en Austria. Hablamos de Sebastian Kurz, futuro jefe de estado de su país, quien en cuestión de imagen sigue la estela marcada por Emmanuel Macron y Justin Trudeau (presidentes de Francia y Canadá respectivamente). Su pelo engominado, los trajes Slim-fit, las camisas blancas de cuello italiano, el calzado clásico y una muy leve concesión a la joyería son las claves del estilo de quien se va a convertir en el mandatario más joven de Europa.
Capas largas y pelo engominado
Nada de rapados, afeitados laterales o corte a raya que puedan hacer volar la imaginación de sus detractores. Desde muy joven, Sebastian Kurz lleva su pelo denso y ondulado en un corte de capas muy largas, que domina a base de productos fijadores.
El estilo de un hombre lo marcan sus zapatos
En la elección de sus zapatos deja claro sus gustos clásicos y prefiere apostar por lo seguro. Si viste de traje, lo combina con zapatos de cordones, generalmente de punta afilada. Cuando opta por una indumentaria informal, prefiere los mocasines de antifaz y se decanta por firmas como Tods.
Acentúa su juventud prescindiendo de la corbata
Prescindir de la corbata se ha convertido en una de sus señas de identidad, un gesto que no hace más que acentuar sus rasgos juveniles, aunque nunca deja de lado las camisas blancas de cuello italiano. No obstante, en las ocasiones en que las tiene que utilizar, las elige de patrón estrecho y en tonalidades preferiblemente oscuras.
Colores oscuros y corte estilizado para sus trajes
Kurz es un hombre alto y espigado que potencia su estilizada figura con trajes ejecutivos, con botonadura en fila, de corte italiano Slim-fit. Este estilo ha servido para que sus críticos, con sorna vienesa, acuñen el término “Slim-fit Faschismus”. Generalmente utiliza colores oscuros, chaquetas de dos botones y doble abertura en la espalda. A pesar del patrón ceñido, todo muy safe.
Una leve concesión a la joyería
Si es que se puede llamar así a una pulsera de cuero trenzada. Este accesorio, que no suele enseñar en actos oficiales, le lleva acompañando desde su juventud y es la única concesión a la modernidad que se permite este político dispuesto a hacer historia.