Estamos en plena época de bodas y toca pensar en el modelito perfecto, tanto por la hora y el lugar del evento, como por la figura. Cada cual se conoce y sabe perfectamente qué le sienta bien, qué le gusta potenciar y qué prefiere disimular de su cuerpo, fundamentalmente en ocasiones especiales. Cuando se tiene una talla grande es importante saber sacar partido de las curvas, por eso es importante saber que hay ciertos patrones y tejidos que favorecen más que otros, algunos trucos que estilizan y errores en los que no hay que caer.

El traje pantalón monocolor

Chaqueta y pantalón es una combinación perfecta para bodas de día, de tarde o de noche, sólo es necesario acertar con el patrón y elegir un traje de un solo color o un solo estampado, para evitar cortes en la figura. En cuanto al patrón, una chaqueta bien armada de hombros estiliza la figura y en lo que respecta al pantalón, hay que puntualizar que los anchos tipo palazzo están reservados para mujeres altas como la modelo de tallas grandes Candice Huffine, para las de menos altura es mejor un modelo tapered como el de Gabi Fresh (ajuste normal en las caderas que se estrecha a lo largo de la pernera) y de largo por encima del tobillo.

Busca colores claros para las ceremonias de mañana como el estampado rosa de Violeta by Mango, vibrantes para las de tarde como este con detalle de botones en el lateral de Eloquii y oscuros para las de noche como este azul marino de H&M o y, en cualquier caso, llévalo con altísimas sandalias, como la actriz Octavia Spencer, o con un zapato de tacón bien escotado.

Vestidos con abertura

Enseñar algo de piel es un gran truco para aligerar peso y si tienes unas buenas piernas, la mejor manera de hacerlo es con un vestido que tenga una abertura por la que se asome una de ellas. Ya elijas la manera más sutil, con un vestido cruzado que se abre al andar, como este diseño (el primero es un diseño de Eva Mendes para la firma New York and Company), o la más descarada, con una vertiginosa raja lateral como la de este vestido de Pretty Little Thing. Otra posibilidad, si no te atreves con la abertura de la falda, es usar un buen escote, estiliza más de lo que te puedas imaginar. Utiliza también otro de los mejores trucos para afinar la figura: evitar las mangas con demasiado volumen y apostar por la manga-capa como la de este vestido.

Vestidos ajustados

Puede que se trate de una opción que siempre has temido, pero puede favorecer mucho a las mujeres de talla grande que no tengan sobrepeso. Existen algunos trucos muy simples que ayudan a que te veas más estilizada, el primero es un clásico de Kim Kardashian y Chrissy Teigen, usar una prenda ligera del mismo color por encima del vestido, como este conjunto que puedes encontrar similar en Pretty Little Thing. El segundo es un patrón que favorezca, como el de este vestido naranja de Asos Curve. El tercero consiste en unos drapeados estratégicamente colocados, como los que llevaba el Versace de Serena Williams en la boda real. El último es utilizar ropa interior reductora algo que, como te hemos contado, ya saben muchas famosas.

El cruzado mágico

No tiene nada que ver con aquella marca de sujetadores, se trata de un tipo de escote que reduce mágicamente el volumen del busto y el tórax que consiste en marcar una cruz en el pecho, simétrica como la del vestido de Adele o asimétrica como la de este vestido de Violeta by Mango, y que actúa ópticamente como una faja reductora. Usa y abusa de este patrón, así como del envolvente, en vestidos, blusas y tops, y trajes de baño como este de lunares o este otro de rayas.

Alíate con las transparencias

Ya hemos comentado que para afinar la figura un buen recurso es enseñar piel. Si hay quien no se siente cómoda con escotes, tirantes y aberturas, se puede utilizar el recurso que utilizan María Rodríguez y la actriz Melissa McCarthy, que consiste en cubrir por medio de transparencias. El tul, el plumeti o el encaje, pueden ser grandes aliados ya que visualmente no resultan pesados. Tienes propuestas interesantes como este top de H & M, este vestido de Asos o este otro de Mango.

Los tejidos que pesan

Algunos tejidos ayudan a que la figura resulte más estilizada y son todos aquellos que pesan, como el que lleva Katie Sturino o en terciopelo, metalizados, con lentejuelas, pedrería, como el que lleva y flecos, o con mucha caída, como satén, gasa o viscosa. Lo importante en que caiga, como este vestido de Eloquii o este modelo de Forever21, a menos que el vuelo parta de la cintura y el tronco vaya ceñido. Si el vestido no pesa lo suficiente hay un truco que consiste en colocar piezas de plomo en el dobladillo del bajo o, en su defecto, elementos que pesen como unos flecos de pedrería, que es el recurso utilizado por la actriz Chrissy Metz.

Y… ¿por qué no un mono?

Probablemente has pensado muchas veces que no es una prenda para ti, pero es porque no te has probado el patrón correcto. Recopilemos: monocolor, largo por encima del tobillo, escote de pico o patrón cruzado y de tejido que pese. Si reúne todas estas características has encontrado la prenda perfecta. Buscar uno así no es ninguna locura, te proponemos este verde de Asos (el mismo de soy curvy), este estampado de Eloquii o este rojo de Pretty Little Thing.