¿De qué se avergüenza Cressida Bonas, la novia del Príncipe Harry?
Las locuras de las juventud pasan factura, que se lo digan a Cressida Bonas que se creía la reina del mambo cuando grabó algunas escenas subidas de tono para una serie y ahora, justo cuando se dice que se va a casar con el Príncipe Harry, salen a la luz. Un motivo más para que la Princesa Catalina diga a este matrimonio (con voz Amy Winehouse) NO, NO y NO.
Cressida Bonas se ha puesto en el ojo del huracán mediático gracias a su enamoramiento con el Príncipe Harry y no todo iban a ser piropos para ella. Vale que es toda una ‘it girl’ y que ha conseguido reformar a 'Harry, el sucio' (cada uno tiene el mote que se merece), pero también tiene un pasado… como todos.
Corría el 2009 cuando Cressida intervenía en la serie ‘Trinity’, algo así como un ‘Gossip Girl’ a la inglesa rodada en la Universidad de Londres. Cressida interpretaba en el cuarto episodio a una estudiante que pertenecía a las chearleaders y que ofrecía favores sexuales a cambio de obtener votos en el consejo de alumnos.
Aunque son sólo dos minutos los que Bonas aparece, son suficientes para ver a la novia del Príncipe con un escueto top de Superman que deja ver su abdomen. Un amigo de la joven asegura que Cressy está destrozada: “Tenía la esperanza de que esto nunca saliera a la luz”.
Parece mentira, ni que viviera en una cueva, al final todo sale. En fin, le ha jugado una mala pasada las ansias de protagonismo. Además, en el elenco de actores de la serie estaba también su hermanastra, Isabella Calthorpe, amiga íntima del Príncipe Guillermo con la que mantuvo una frugal relación y cuya presencia no es demasiado bien recibida por Catalina de Cambridge.
Afortunada Catalina, que tiene una nueva excusa para poner en su contra a la Familia Real. Mucho mejor Pippa, que estaba aprendiendo a bailar flamenco como las locas por si acaso a Harry le da por sacarle de ‘tablaos’.
Pero, ¿por qué sale justo ahora su pasado? No es casualidad que los medios estén echando el resto con Cressida porque hay rumores –y muy fuertes- de que la pareja podría casarse en 2014. Lo más fuerte es que el que más insiste es el rebelde de Harry.
Según cuenta la prensa británica, el nacimiento de Jorge de Cambridge ha hecho que su tito recapacite y quiera sentar la cabeza. Hay que tener en cuenta que este factor hace que él se retase del tercer al cuarto puesto en la línea de sucesión y si su hermano incrementa la familia será aún más relegado.
Otro factor clave de esta decisión de Harry es que está enamorado. Hasta las trancas. Cierto que no es que sea un chico difícil de enamorar, que ya bebió los vientos por Chelsy Davy con la que mantuvo un tórrido y turbulento romance entre 2004 y 2011, pero lo de Cressida le pilla al borde los 30 y no es lo mismo.
La que pone un poco el freno es Cressida (o 'Smally' como la llaman en casa). Apenas tiene 24 años y dice que es muy joven para verse de blanco y enfrente del cura dando el sí quiero. Lo haga o no, seguro que aprende a guardar un poco mejor el poco pasado que aún quede por descubrir, ya ha recibido su primera lección de princesa.