Los Príncipes de Gales volvieron a pisar la alfombra de los premios del cine británico, que ayer entregaba sus Bafta, alejando los rumores de crisis que apuntaban a una infidelidad de Guillemo el día de San Valentín y que tenían en jaque otra vez a la monarquía del Reino Unido.
Pero llegaron a la cita como dos estrellas, llenos de divinidad y optimismo.
1. Kate recuperaba su Alexander McQueen blanco y lo combinaba con guantes negros y unos pendientes low cost de Zara. Guillermo estaba guapo con su estupendo esmoquin cruzado de terciopelo.
2. Cate Blanchett también repite. Su divino negro de Maison Margiela ya lo llevó en los Oscar de 2015 con collar XXL de turquesas. Anoche lo reinventó con perlas y joyas de Vuitton y estaba perfecta.
3. Julianne Moore es la estrella como de antaño que todos queremos en una alfombra roja. Anoche su negro con estola de plumas blancas era de Saint Laurent.
4. Ana de Armas abandona el negro con este rosa satén de Louis Vuitton.
5. Vuitton al poder con el palabra de honor oro viejo de Hoyeon Jung.
6. De Vuitton era también el vestido joya/s de Sophie Turner.
7. De Saint Laurent era el binomio blanco y negro de Jamie Lee Curtis.
8. Blanco y escote con corona de perlas. El complicado diseño de Tamara Ralph para Lily James causó sensación.
9. Murad, negro y raso. Sara Sampaio.
10. Cobre, flecos y art decó en el Vuitton de Cynthia Erivo.
11. Catherine Zeta-Jones ha hecho una pacto con el diablo. En otra persona su vestido habría sido un error seguro. En ella era de Diosa en llamas de júbilo.
12. La otra pareja en blanco y negro de la noche, la de Geri Halliwell y Christian Horner.
13 y 14 De los chicos me quedo con Austin Butler y Jamie Dornan. Par de guapos.
15. Y en el lado opuesto del look de Eddie Redmayne, con su esmoquin jumpsuit de McQueen.
16. Sólo si eres un bellezón exótico te puedes calzar el lila de plumas de Jodie Turner-Smith.
17. Anya Taylor-Joy y la extravagancia de Schiaparelli. No era el mejor look de la noche, lo sé, pero como soy objetivo, a pesar de mi novela ‘Schiaparelli, La italiana de París’ y de mi amor por la esencia de Elsa, la dejo en el limbo del acierto al error.
1. Megan Barton no habría estado elegante de ningún lado. La verdad. Su rojo era tan chillón como el ataque de su peluquero.
2. Claro que para peluquero con ataque de nervios el de Little Simz.
3. ¿Qué es lo que llevaba exactamente Aimee Lou Wood? No importa, era tan feo que daba igual.
4. Andy Serkis y Lorraine Ashbourne. Si me dicen que iban disfrazados de algo me lo creo.
5. Tom Grennan se equivocó de party.
6. Creo que Sheila Atim envolvió en papel de plata el resto de los embutidos para que se los llevasen a casa los invitados.
7. Sandy Powell repartía el kétchup.
8. Zainab Jiwa se podía haber calado hasta los pies el sombrerito y nos ahorrábamos ver el resto del look. Se lo puso todo así, como si se le hubiese caído encima en una avalancha.
9. Andreea Cristea, ya hay que tener ganas de parecer una croqueta. Qué horror.
10. Igual es la primera vez que un Valentino no me gusta. Pues así me pasó con el de Nicola Coughlan. No sé si era por ella o no, pero parecía una Menina.
11. A Rosie Huntington-Whiteley la salvo el cisne simple y estaba sexy. Pero la falda era tan confusa que no le pillé el rollo.
12. Tampoco me gustó nada el Fendi de Ariana DeBose porque cuando la transparencia te deja en body es que algo falla en la insinuación.
13. Vera Wang se vistió de sí misma pero parecía salida de un naufragio. Pobre.
14 Sí, Emma Thompson me encanta, ella y su optimismo eterno. Pero anoche su total White con zapatos dentados como que no… Ya lo siento. Pero me quedo con su sonrisa.
15. El tul plisado naranja de Florence Pugh lo firmaba Nina Ricci y no era lo más elegante, ni falta que hacía. Era optimismo en vena y eso deja siempre buen sabor de boca aunque no seas un súper acierto.