Aciertos y errores de la boda de Laura Pausini y Paolo Carta
Llevaban 18 años juntos y aplazando una boda que deseaban por muchos motivos, entre ellos una pandemia que hizo que Laura Pausini se negase a celebrar el día más feliz de su vida con mascarillas.
Y hace unos días, en la intimidad de los suyos, la cantante y su chico, Paolo Carta, se daban el 'Sí, quiero'.
Conociendo a la Pausini como la conocemos bien en España, nada iba a ser muy convencional, así que poco me han sorprendido algunos de los detalles de la boda.
Aciertos
1. La novia. Con todo su optimismo y a pesar de lo farragoso de la mezcla de sus elecciones.
Laura es de esas mujeres que jamás bajan la guardia del buen humor. Y eso es un acierto para casi todo en la vida aunque no me gustase su vestido con guantes de plumeti, blazer y velo. O sobraba velo o blazer, pero todo junto era como ese divertido caos que la envuelve en sus outfits de escena y televisión.
2. Su maquillaje y su recogido eran mucho más depurados que su estilismo general. Bien ahí.
3. Su hija Paola y su vestido de mini novia para actuar de dama de honor.
Errores
1. El novio. A pesar de la pinta de simpático. Un total black debería estar prohibido siempre para un novio en cualquier enlace. Si se ha optado por un esmoquin, costumbre tan americana que nos sigue chocando en la tradicional ceremonia europea, al menos que sea en toda regla, con camisa blanca y pajarita clásica de lazo o corbata negra. Pero con camiseta negra como que no.
2. Sus zapatos eran más de "canalleo urbano" que de novio.
3. Que los invitados fuesen unos en zapas y jeans, otros como de roqueros de escenario, y otros como para salir de tardeo tenía cero conexión con unos novios tan vestidos de novios, la verdad. O sea que o ellos iban de más para este ceremonia, o los invitados de menos.
Pero por encima de todo estoy seguro de que esta boda, deseada por largo tiempo, ha sido tremendamente feliz para ellos. Y por toda esa felicidad que Laura nos ha regalado con su arte y su positivismo durante tantos años de carrera bien se lo podemos devolver con un "que seáis muy felices por mucho mucho tiempo".