Aciertos y errores del I Premio ‘Women in Art’ de la revista Harper's Bazaar
Carmen Thyssen abrió ayer las puertas de su Museo a amigos y personajes de la sociedad para recoger el I Premio ‘Women in Art’ de la revista Harper's Bazaar en reconocimiento a su labor fundamental para mantener en España una de las colecciones de arte más importantes del mundo.
Ella nunca ha sido discreta en su dress code. Ayer no iba a ser diferente y sacó de su joyero todo el poderío de sus rubíes con diamantes. Y de su armario todos esos metros de tela que conforman sus vestidos y sus rosetones repollo.
Aciertos
1. No era la mejor de la noche, lo tengo claro. Pero ni mucho menos la peor y voy a hacer como con las buenas novias, darle el arranque preferente ya que era la homenajeada.
Negro y rojo. La Thyssen es adicta a esta combinación, a veces infernal. También al fisio que la recompone después de que le quiten los quilates que soportan su cuello y los repollos de tela de sus escotes y cinturas. Sus collares son como de reina reinante, también lo digo.
2. Elie Saab se encargó de nuestra top eterna Nieves Álvarez con este blanco de pecho de enjambre de oro.
3. A Eugenia Martínez de Irujo le funciona a las mil maravillas el rollo cordobés de Juana Martín. Combinó su espectacular falda beige de lunares negros con una chaleco goyesco de su madre Cayetana.
4. Carmen Lomana ha abierto el armario de Alejandro de Miguel para varios eventos en los últimos tiempos. No todo me gusta de él, pero su vestido rojo de ayer con mangas pagoda y escote de strass en transparencia era perfecto para ella en esa noche.
5. Inés Sastre volvió a los vestidos de noche, tras muchos años de divagaciones en pantalón, con este plisado champán de lentejuelas y cinturón negro de rosetón. No me convencía la sisa pero la vi guapa.
6. Esther Cañadas acababa de volver de Venecia. Igual se trajo consigo este vestido de cuerpo bustier y falda drapeada tan Versace, sin saber si lo era o no.
7. Mario y Alaska son un perfecto equipo en cualquier alfombra roja social de postín.
Errores
1. El traje de Javier Calleja era como de entierro en el pueblo cuando te ha pillado el luto por sorpresa.
2. Los bajos de su mujer, Alicia Gutiérrez, no es que arrastrasen, que tiene su punto cuando es medido lo de cubrir el tacón, es que si no se dejó los dientes fue de puro de milagro.
3. Luz Casal es una diva en todos los aspectos. Y me fascina que lo sea eternamente. Peor yo ayer le habría arrancado esas botas gold con ese largo de falda tan complicado.
4. María Escoté podría haber hecho la performance de la noche perfectamente con una bola disco y mucho confeti de ese que ahora prohíben hasta cuando tú pagas la party y la limpieza.
5. Supongo que lo de Bernardo Torrez era un guiño al arte, pero parecía que se había comprado el chaleco en los souvenirs y delantales de cualquier quiosco turístico del centro de cualquier ciudad.
7. No, no le pillo el rollo a los guantes de gasa hasta la sisa de Esmeralda Pimentel. Sin ellos me habría gustado mucho más.
8. Carmen Calvo tiene esa extraña dualidad de gustarme a veces con sus extravagancias con estilo y matarme otras. Ayer su trench con blusa, falda plisada y botines se me antojó un disfraz de Mary Poppins. Igual la trajo un viento del norte y se la lleva un vendaval. Vaya usted a saber.
Y sí. Había alguna gente que parecía que había salido de los mismísimos cuadros del museo, aunque el de la Thyssen no sea el de los horrores. ¡Qué cosas!