Aciertos y errores de los Premios Condé Nast Traveler
No sé si es mejor para los invitados los dress code imposibles, los tradicionales o los que no existen y se vuelven locos para saber cómo ir a un sarao.
Anoche se entregaban en el Florida Park de Madrid los Premios Condé Nast Traveler y el código de vestimenta era Pijama Party.
¿Se mascaba la tragedia? ¡Se mascó!
Aciertos
1. Sólo las divas van por casa con estas túnicas para irse a la cama como Rossy de Palma. Y si es con party con más razón y poderío. El casquete lo voy a tomar como que se hizo la toga después de lavarse el cabello.
2. Natalia Rodríguez entendió de maravilla el doble sentido de este dress code. Pijama pijama y fiesta fiesta. O sea, un pijama de lentejuelas.
3. Miriam Giovanelli unió con atino party y pijama con un batín que lo mismo sirve para salir a cenar con unas buenas sandalias, que para andar por casa mona y cómoda antes de irte a dormir, o por si se monta la party.
4. El de Elia Galera era como un jardín japonés y súper ad hoc.
5. María Esteve usó camisón lencero y batín, y era así de fácil acertar con prendas que tantas veces vemos en las alfombras sin que tenga que ser una Pijama Party.
6. Manuela Velasco se lo tomó tan al pie de la letra que directamente iba en pijama, feo, muy feo, y sin nada de fiestas. Pero cumplir cumplió en alguna medida.
Errores
Seguro que los chicos escucharon pijama party y pensaron que las chicas iban a ir con pijamas de ositos y calcetines de lana. Pero no. Mucho mundo femenino anoche decidió sacar el deshabillé. Y esto no siempre es un acierto.
1. Greta Fernández iba en bragas con canesú, más que en pijama.
2. Lourdes Hernández hizo lo mismo y parecía que había salido de la tarta del fin de fiesta de esta party pijamera.
3. Gabriela Andrada creyó que su bolso oso ya convertía en pijama de dulces sueños su vestido de lycra de la que arde.
4. Peor era lo de Guiomar Puerta, que yo intuyo que creyó que sus pompones de marabú de las sandalias simulaban aquellas zapatillas divinas de casa que usaba mi abuela con sus pompones en los empeines. Pero no, no acertó.
5. Lo de Inés de León era feo hasta para meterse en la cama y que nadie te vea.
6. He intentado encontrar a un chico en pijama y algo mono, pero ha sido imposible. Ellos, parece, se van a la cama con zapas y camisas de dudoso gusto aunque en sus apartamentos de solteros o de Rodríguez se haya montado la gran fiesta.
El único que cumplió, aunque se quedase "corto" para la party, fue Vital Villarubia. Y algo es algo cuando uno al menos intenta cumplir con el código de la night. Ole por él y sus bemoles.