Calentando motores para la ceremonia anual de los Oscar anoche se celebraba la 28ª edición de los SAG, los premios del Sindicato de Actores. Y con ellos volvían esas alfombras rojas americanas llenas de glamour, también de muchos despropósitos, que son el escaparate más visual de las casas de moda de todo el planeta.
Que no teman los maliciosos, que sí, que hay derrapes para soltar la lengua de aquí a Lima.
1. Cate Blanchett volvió a confiar en Armani, como hiciese para recoger nuestro Goya Internacional. Su vestido negro con escote joya en azabache la volvía a convertir en lo mejor de la noche.
2. Oscar de la Renta consiguió esta perfecta imagen de rotundidad y fragilidad al mismo tiempo con su vestido columna y mangas farol para Selena Gómez.
3. Un tuxedó champán con pantalón palazzo. El ‘aciertazo’ de Jessica Chastain era obra de Christian Dior.
4. Naomi Watts y su Fendi plisado con cuello cisne. Lo más.
5. Armani vistió a Lady Gaga de diva de antaño, con este blanco de escote corazón abierto.
6. Rojo, hombreras rectas, escote V. La elegantísima opción de la adorada Caitriona Balfe era de Saint Laurent.
8. Nicole Kidman es ya una maestra en estos vestidos donde nada se ve, pero todo tiene su magia. Este negro, con cuello lazada en blanco, olía a Saint Laurent por todos los lados.
7. Rosa y con diadema. Así era el Dolce & Gabbana de Helen Mirren. Ella es The Queen.
9. Ni era traje de chaqueta, ni tuxedó. Ni era vestido, ni falta que hacía. El look de Elle Fanning, Gucci, era pura fiesta.
10. Marlee Matlin y su lady by Lafayette 148.
11. Me congratula por fin poner a Salma Hayek en los aciertos, ella hace lo imposible por que no sea así normalmente. Su Gucci de ayer, sin ser lo mejor de la noche, lo consiguió. Algo es algo.
12. Rosa palo y con exuberancia de flores. Jennifer Hudson y Vera Wang son tan New York a las puertas de la primavera…
13. De los chicos siempre me quedaré con Bradley Cooper.
14. Un ‘casi cuero’ rojo hecho noche. El Vuitton de Cynthia Erivo lo podría haber firmado mi Elsa Schiaparelli.
15. Sin embargo nunca Schiaparelli fue tan simple y efectiva. Así era el midi negro con fajín cola celeste de Reese Witherspoon.
Por cierto, ¿aún no habéis leído algunos/as mi última novela ‘Schiaparelli, la italiana de París’? Os espero eh.
1. No sé si me chirriaba más el fruncido de Kerry Washington o su color de chaleco de avería en carretera. Juro que no he dormido porque las pupilas se me dilataron hasta el amanecer.
2. A Alexandra Daddario parecía que le habían prestado a última hora su lamé Versace. Que era de esos vestidos de Donatella que según quién se los ponga parece una diosa o un demonio. Aquí las diosas romanas habrían salido corriendo. No lo dudo.
3. Emilia Jones y esta manía de los vestidos con ‘bragas body descanso’ a la vista. Por mucho que lo firme Givenchy.
4. No sabría definir el color del modelito de Elizabeth McLaughlin sin ponerme escatológico así que mejor lo dejo.
5. El traje de chaqueta de Jennifer Landon me habría hecho gracia en una cena con amigas.
6. El de Mira Sorvino ni para eso.
7. ¿Lo de Greta Lee era una colcha de cama?
8. El de Poppy Liu seguro que sí, de cama redonda de night club.
9. Que alguien encierre al que se empeña en ponerle a Bardem las camisas del mismo color que sus americanas y pajaritas. Qué miedo.
10. Que me gustaba el esmoquin azul satén Gucci de Jared Leto, no. Pero esto ya es otra película porque el fascina en cualquier evento. Y eso no se lo quita nadie.