La Casa del Rey ha otorgado hoy todo el protagonismo a la Princesa Leonor con su primer acto oficial en solitario con motivo del 30 aniversario del Instituto Cervantes.
En el evento, lleno de simbolismo y de tradición, la Princesa de Asturias depositaba dos libros en la Caja de las Letras, el lugar en el que se guardan las grandes obras escritas en español. Esa caja de la hija de los reyes será la 2021, situada entre la de Miguel Delibes y la de Severo Ochoa, y contiene desde hoy los ejemplares de la Constitución y de El Quijote, que ya leyó con la infanta Sofía en la tradicional lectura pública del Día del Libro.
Para la prensa extranjera, la Princesa Leonor y la Reina Letizia encabezan esas múltiples listas de las soberanas y sus hijos más estilosos de Europa. En la retina tenemos aún algunos de sus looks más comentados.
El del Día de la Fiesta Nacional, de falda con vuelo en gris perla y jersey de lana y mangas abullonadas, seguirá siendo el top para mí de sus estilismos hasta el momento.
También el azul pastel impecable de su debut en los Premios Princesa de Asturias.
El dos piezas rojo de tweed que llevó en la apertura de la legislatura de 2020 la encumbró ante las plumas más punteras del mundo royal.
No corrió la misma suerte el último año en esos mismos premios que llevan su nombre con su dos piezas joya, de largo bajo la rodilla y con sus primeros tacones, en un outfit que nos recordó mucho a la Reina Sofía, pero no apropiado para una niña con los 14 años que tenía entonces.
El look y su imagen general de hoy se convierten en otro de sus grandes momentos para la historia. Lo desgranamos en cinco puntos clave, que son cinco aciertos.
1. Su vestido blanco moteado de flores desiguales. Romántico, corto, con falda de volantes y mangas trompeta, cinturilla fruncida y cuello con lazada. Aunque a mí me sigan sin gustar sus zapatos de salón con mini tacón. Con bailarinas habría sido un acierto redondo.
2. Su melena natural de puntas rizadas con semi recogido lateral para impedir que el flequillo le tapase la cara durante el acto.
3. La espléndida actitud a la llegada al Instituto Cervantes, alegre, amable y atenta con el público congregado en la calle a pesar de las distancias obligadas en el marco de seguridad Covid19.
4. La profesionalidad, a pesar de sus 15 años y de los nervios, de sus movimientos y su compostura pública. De esto tiene en la reina una buena maestra.
5. La naturalidad que ha mostrado en los grandes momentos en los que ya ha tenido que intervenir como heredera de la monarquía española conforman esta imagen general de nítida y sofisticada sencillez que alaban en la prensa internacional y que tanto me gusta de ella.