La separación de Shakira y Gerard Piqué ha puesto a toda la familia de la ex pareja en la picota: que si la hospitalización del padre de una, que si la suegra en la puerta… Durante esta vorágine informativa hay una persona que había conseguido mantenerse en segundo plano: el hermano pequeño del ex jugador blaugrana, Marc.
Marc Piqué Bernabeu es cinco años menor que su célebre hermano. Nacido en 1992 (Gerard vino al mundo en 1987) ha vivido en segundo plano la proyección deportiva y mediática del otrora centrocampista. A pesar de ello, ambos sienten pasión el uno por el otro y han acudido juntos a varios actos públicos.
En la web del FC Barcelona figura una imagen de una acto celebrado en el Camp Nou en el que Marc, acompañado por su abuelo, Amador Bernabéu, ex directivo del Barça y actual representante del Club ante la UEFA, recibió una placa conmemorativa por su apoyo al equipo.
Tal es la discreción de Marc que el año pasado, en plena vorágine informativa de la infidelidad de Gerard a la estrella pop colombiana, se casó sin que su enlace saltase a la primera plana de las revistas. El joven se dio el sí quiero el verano pasado con su novia de toda la vida. Una mujer que, según informaba Vanitatis, es miembro de “una buena familia” de la sociedad barcelonesa y cuenta por ello con el beneplácito de la ex suegra de Shakira
A pesar de su perfil discreto, Marc está implicado en el polémico entramado empresarial del ex de Shakira por lo que no es de extrañar que su situación fiscal le “salpique”. Figura como apoderado de Kosmos, el holding del que penden la mayoría de sociedades de su hermano. Según la prensa económica, a sus 30 años, ostenta 11 cargos en seis empresas diferentes.
En lo referente a su expediente académico, Marc está graduado en Administración y Dirección de Empresas por el Instituto Químico de Sarriá, un prestigioso centro privado muy celebrado en la zona alta de la Ciudad Condal.
Gerard ha hablado en alguna ocasión de su querido hermano menor. “No debe de ser fácil ser mi hermano pequeño, pero Marc es un crack”, dijo hace unos años en una entrevista. Según explicó, Marc también jugó a fútbol de pequeño y aunque apuntaba alto, se quedó en el camino. Este extremo lo ratificaba el padre de ambos en otra entrevista: “Le comparaban siempre con su hermano, y eso, se quiera o no, era difícil de llevar”.