El mundo llora el fallecimiento de Sinead O’Connor pero la realidad es que, en vida, le dio la espalda. La cantante irlandesa alcanzó una popularidad estratosférica a principios de los años 90 gracias a 'Nothing Compares 2 U'. La desgarradora letra de Prince, su melancólica manera de cantar y su impactante look con el pelo rapado la convirtieron en un icono. Aquello duró poco: el escándalo que le sobrevino tras romper una foto del Papa en público en la cima de su popularidad y sus graves problemas mentales hicieron que su éxito fuera efímero y su vida tremendamente desdichada.
La intérprete ha tenido a lo largo de su vida varios intentos de suicidio que llevan años copando titulares como aquella vez que subió a Facebook un vídeo grabado en un motel de New Jersey adelantando que quería quitarse la vida. Diagnosticada en 2003 con varias enfermedades mentales, entre ellas, depresión severa y trastorno bipolar, cuesta encontrar en la hemeroteca una noticia suya que venga asociada a una noticia feliz.
Los problemas de Sinead empezaron en su infancia: sufrió abusos de su propia madre. Según sus propias palabras, la señora que la trajo al mundo la maltrataba física y sexualmente. Siendo adolescente se escapó de casa, pero la pillaron robando y acabó en un reformatorio.
Con este caldo de cultivo, la trayectoria vital de Sinead ha estado repleta de comportamientos erráticos: problemas con las drogas, apariciones públicas cuestionables y desórdenes mentales cada vez más severos que la llevaron a erigirse en sacerdotisa de la orden católica disidente de los tridentinos y posteriormente convertirse al Islam.
Pero el momento más difícil de Sinead tuvo lugar el año pasado, cuando su hijo Shane, de 17 años y también diagnosticado con problemas mentales, se escapó del hospital en el que estaba ingresado por riesgo de suicidio y dos días después la policía encontró su cuerpo sin vida. La cantante tiene otros tres hijos de tres padres diferentes con los que ha tenido una relación complicada.
A pesar de que solo 'Nothing Compares 2 U' puede ser considerado un éxito global, durante toda su trayectoria Sinead ha dejado un legado musical impagable. Temas introspectivos, algunos con cierto calado en circuitos alternativos, que deben prevalecer sobre su triste biografía para que sea recordada como la intérprete única y talentosa que fue.