Este años, apenas separadas por cinco meses, hemos dicho adiós a dos enormes iconos del cine y la televisión de España: Carmen Sevilla y Concha Velasco. Las dos actrices, que fueron grandes amigas en la vida real, han tenido dos vidas llenas de paralelismos, incluso en su triste final. A modo de homenaje de estas musas nacionales escribo estas palabras en mi blog.
La amistad entre Carmen Sevilla y Concha Velasco se forjó en los sets de rodaje y los pasillos de Telecinco, donde ambas fueron las grandes estrellas de la cadena durante la década de los 90. El cariño que se profesaban era tal que en 1999 Concha le organizó uno de los momentos más emocionantes de su carrera cuando presentaba ‘Sorpresa, sorpresa’: ¡su reencuentro con Charlton Heston!
“Nunca jamás pensé que pudiera tener una sorpresa tan maravillosa a mis 68 años y que me la diese Concha. Nunca olvidaré la Octavia que hice contigo”, le decía Carmen a la estrella de Hollywood con la que protagonizó ‘Marco Antonio y Cleopatra’ en 1972.
El talento que corría por las venas de la Sevilla y la Velasco era inmenso. No se las puede reducir a una sola disciplina porque opacaría todas las demás. Triunfaron en el cine como actrices, grabaron temas musicales de enorme éxito y presentaron programas que rompían audiencias. Curiosamente las dos remataron sus respectivas carreras en la pequeña pantalla al frente del mismo espacio: 'Cine de Barrio'. Concha sustituyó a Carmen en 2011. Diez años después era Concha la que debía dejar el espacio cediendo el relevo a Alaska.
Tan queridas han sido Concha y Carmen que las marcas publicitarias se las rifaban para que anunciasen sus productos. Las dos estrellas han sido embajadoras de las marcas más importantes del mercado nacional. La marca de cola más famosa del mundo, el cacao soluble del desayuno o en la firma líder de electrodomésticos contaron con Carmen y Concha como imagen de marca. Ambas lanzaron además líneas de belleza femenina que arrasaron en ventas.
Concha y Carmen fueron muy queridas por el público y adoradas por sus hijos, pero poco respetadas por sus maridos. Las dos apostaron muy fuerte por la vida familiar pero no tuvieron suerte con sus compañeros de viaje.
Tanto Paco Marsó, marido de Concha; como Augusto Algueró y Vicente Patuel, esposos de Carmen fueron infieles y, en ocasiones, demasiado manirrotos con el dinero de sus esposas.
Los problemas de salud y movilidad de sus últimos años también han marcado paralelismos y semejanzas en la vida de las dos queridas estrellas. Ambas cambiaron sus domicilios habituales por confortables residencias clínicas para mantener el mejor nivel de vida posible en el tramo final.