Jaime del Burgo, estuvo casado con Telma Ortiz, la hermana de nuestra monarca, de 2012 a 2016. A pesar de ser un desconocido para muchos, el hombre que aparece en el libro de Peñafiel recién publicado, 'Letizia y yo', ha copado titulares durante toda su vida: la última vez cuando invitaba a saltarse el confinamiento durante la pandemia.
Pero… ¿Quién es? Desgranamos su biografía.
(En este vídeo de 2012, Jaime de Burgo publicaba en su web oficial que estaba casado con Telma Ortiz)
Jaime del Burgo Aspíroz, (nacido en Pamplona en 1970) es hijo del político Jaime Ignacio del Burgo, ex presidente de la Comunidad Foral. En sus redes sociales, hoy sin contenido, se presenta como empresario e inversor. Sabemos que conoció a doña Letizia en el año 2000, cuando la entonces periodista trabajaba para CNN+. Ambos forjaron una buena amistad y el navarro firmó como testigo en su boda con don Felipe.
Sin embargo, la trayectoria mediática de Del Burgo comienza mucho antes. En 1991, aprovechando su papel como hijo de un dirigente de UPN, obtuvo cierta notoriedad en 1991 cuando siendo un veinteañero publicó el libro 'El sendero de la Paz', en el que abundaba en las biografías de las víctimas del terror de ETA. El mayor de los cinco hijos ex presidente de la comunidad foral de Navarra (llamado también Jaime del Burgo) contó en una entrevista concedida al diario ‘La Razón’ que creció “con una gran ansiedad, que derivó en trastorno: a los dieciocho años, cuando publiqué aquel libro, me movía en las alturas de la escala de Hamilton”, dijo en una entrevista concedida al diario La Razón.
Su nombre se convirtió en habitual de la prensa del corazón cuando contrajo matrimonio con Telma Ortiz, con la que se casó en secreto en el Monasterio de Leyre, en Navarra. Poco después de su casamiento protagonizó una de sus primeras polémicas cuando publicó un artículo en El Mundo en el que atacaba a los paparazzis que tomaron imágenes del evento. Más tarde asesoró a su esposa en una macrodemanda contra varias publicaciones que terminó perdiendo.
Del Burgo estuvo cuatro años casado Telma Ortiz: en ese tiempo vivieron separados mucho tiempo debido a que ella residía en Barcelona y él trabajaba en Nueva York. Además, fue un matrimonio especialmente convulso, lleno de rupturas y reconciliaciones (llegaron a firmar un acuerdo de divorcio en 2014) que finalizó de manera oficial en 2016. "Telma y yo cesamos nuestra convivencia matrimonial y actualmente llevamos a cabo los trámites jurídicos para la disolución del matrimonio. La ruptura se produjo de mutuo acuerdo y mantenemos nuestra amistad", comunicó entonces a través de sus redes sociales.
Tras su separación, Jaime del Burgo continuó asomándose a los medios de comunicación de manera recurrente. En octubre 2018 el semanario LOC publicó que había contraído de nuevo matrimonio en Madrid. Su esposa, con la que ha tenido una hija llamada Ulla, es una mujer de origen sueco llamada Lucía Díaz Liljestrom. Residen a caballo entre Suiza y Estados Unidos.
Doctor en derecho financiero, empresario y también escritor en su trayectoria, aparecen dos decenas de empresas en las que ha participado, muchas en el extranjero. Entre ellas Lastpool Ltd, con sede en Londres, Pacadar edificación, Gasteiz Desarrollo Industrial o Hispanolusa Teconológica de Edificación. También estuvo asociado al ex presidente de Telefonica, Juan Villalonga, en un negocio de construcción de viviendas prefabricadas en zonas deprimidas. En 2015 salió a la luz que había creado tres nuevas empresas por Internet, las tres domiciliadas en Suiza: destinadas a la compra-venta de edificios on-line, seguridad en Internet y venta de productos delicatessen italianos on-line.
Uno de los últimos titulares que protagonizó se remontan al 2020, cuando publicó un artículo de opinión de OK Diario. En aquel texto, que ilustraba junto a una foto con su hija, llamaba a la rebeldía ante el confinamiento por el coronavirus: "Si estás bien, sal a la calle y haz vida laboral normal. Trabaja. Si hacemos una vida anormal la anormalidad se instalará entre nosotros en todos los órdenes. Tengamos un poco más de valor. Menos miedo a la muerte. Aquí todos estamos de paso unos años. Hay que huir de las redes. Trabajar más que nunca para empezar a recuperar mañana tanta riqueza perdida por culpa no del virus, si no de unos dirigentes vergonzantes", decía.