Popular presentador de la televisión catalana, Marc Giró encuentra poco a poco su hueco en las pantallas de ámbito nacional. En Telecinco lo hemos visto en programas como el debate de 'Gran Hermano' y otras tertulias livianas. Desde hace unos meses presenta un late night en la televisión pública. Pero, ¿quién es la persona tras este rostro cada vez más popular?
Nacido en Barcelona en septiembre de 1974 (tiene, por tanto, 49 años) está licenciado en Historia del Arte pero lleva toda una vida vinculado a la comunicación y la moda. Editor durante casi dos décadas de la revista 'Marie Claire', comenzó a colaborar en la televisión autonómica de Cataluña en 1998 y aquella aventura le cambió la vida: fue en el plató del programa 'Les 1000 i una', presentado por Jordi González, donde conoció a su marido.
Giró está unido sentimentalmente desde los tiempos de la primera legislatura de Aznar al también periodista Santi Villas, a su vez hermano de la célebre Thais Villas. “A menudo, que tu vida sea una mierda o brillante depende de la persona que tengas al lado, y yo con Santi Villas tengo la vida que quiero tener, una vida feliz", declara. El esposo de Giró también es un rostro reconocible de la televisión gracias a la temporada en la que ejerció de colaborador en 'El Programa de Ana Rosa'.
Histriónico por naturaleza, Giró reconocía en una entrevista reciente que le encanta representar un papel mediático algo teatralizado. “Mucha gente me pregunta: ‘¿usted es así?’ y respondo que ‘sí y no’. Con los años también acabas descubriendo que en este oficio no debes tener rincones ni miedos. Tienes que hablar de todo, sin caer en esto tan cursi de ser transparente”, explica. Su particular personalidad puede reconocerse en este vídeo en el que habla sobre el último concierto de Madonna en Barcelona.
El periodista, que según el portal de transparencia de RTVE ingresa 3.500 euros por cada programa, viene de una familia de clase media. Su primer trabajo fue de canguro cuando tenía 17 años y ejercía de voluntario olímpico en Barcelona 92. “Yo estaba en el Real Club de Polo de Barcelona y escuché que una pareja de voluntarios buscaba canguro y les dije: ‘Yo esto lo puedo hacer’”, recuerda con nostalgia. “Fue una oportunidad de negocio”, añade con socarronería.
En una entrevista reciente Giró contaba que no le gusta la música ni viajar pero disfruta gastando dinero: “Yo recuerdo no tener un duro y gastar. Me gusta gastar y comprar cosas buenas, porque duran más”.