La ‘dolce vita’ de Ana Aznar y Alejandro Agag en Italia: yoga, sostenibilidad y gastronomía
Han pasado ya más de dos décadas de la fastuosa boda de la hija de José María Aznar y Ana Botella en El Escorial. Una jovencísima Ana Aznar, entonces hija del Presidente del Gobierno, se daba el “sí quiero” con un desconocido joven prometedor de nombre Alejandro Agag. El matrimonio, que sigue unido y tiene cuatro hijos adolescentes, fijó hace dos años su residencia en Roma donde tienen una vida de ensueño.
Actividades históricas y restaurantes
El motivo por el que la familia reside en la Ciudad Eterna tiene un motivo de peso: Ana tiene un puesto de trabajo como profesora en una prestigiosa universidad americana radicada en la capital italiana: la John Cabot University. Allí toda la prole vive feliz, tal y como la propia Ana ha comentado a una revista. “Roma está llena de diversión y de actividades históricas para hacer con los niños, es supercaminable, hay muchos espacios verdes, la comida es fantástica y el clima es bueno. Además, el mar está a una hora y hay una buena red ferroviaria que te lleva en nada a Florencia, Milán o Venecia. ¿Qué no puede gustarme de Roma?”, comenta orgullosa.
Rutinas saludables para todos
Roma además ofrece a Ana Aznar y su marido la posibilidad de mantener unas rutinas ‘healthy’ que la pareja comenzó a cultivar en Londres, su anterior destino: el mindfulness y el yoga. En este sentido, el desafío de enfrentarse a una mudanza y a empezar de cero a una ciudad suponía para todo el clan un reto mental y social tremendamente motivador.
Ella es profesora y él un exitoso emprendedor
Mientras Ana prosigue con su exitosa carrera académica (que combina con una empresa fundada por ella misma sobre crianza), Alejandro triunfa en el mundo empresarial. Agag lidera varias empresas vinculadas con el mundo de la automoción y el desarrollo sostenible.
Cuatro hijos varones ya criados
Ana, de 42 años, y Alejandro, de 53, disfrutan en Roma de la tranquilidad de tener a sus cuatro hijos varones crecidos y criados. El primogénito de la pareja, Alejandro, cumplirá 20 años este 2004. El segundo, Rodrigo, tiene un año menos ya que vino al mundo en 2005. Los dos benjamines, Pelayo y Alonso, tienen 16 y 13 años respectivamente.