Los amantes de la música remember no caben en sí de gozo: Sonia y Selena han enterrado el hacha de guerra, van a volver juntas a los escenarios. Y puede que lo hagan en en Benidorm Fest 2025, donde han sido seleccionadas para estar en la lista de candidatos. Después de casi un cuarto de siglo enfrentadas y tras un intento fallido de reconciliación en el año 2011, las dos intérpretes han decidido juntar la fuerza torácica que les hizo célebres. Pero… ¿qué pasó entre ellas para que nos hayan hecho esperar tantísimo tiempo?
El origen del proyecto data de finales del año 2000 cuando la discográfica Vale Music decidió hacer un casting de chicas exuberantes para lanzar un grupo de música ligera. A aquellas audiciones y por cauces separados llegaron Sonia (la rubia) y Selena (la morena). La primera, que por entonces tenía 26 años, había hecho sus pinitos como cantante de temas dance y modelo, en aquella época contaba con orgullo que había ganado un concurso de dobles de Pamela Anderson. Selena recaló en el plan con 25 años: hasta entonces se ganaba la vida como bailarina y había actuado junto a Ricky Martin o Enrique Iglesias en algunas presentaciones. Vocalmente había puesto su voz en jingles y cuñas publicitarias de la radio.
Una vez reclutadas, la discográfica apostó por ellas para que representasen a España en el Festival de Eurovisión del año 2001 y aunque quedaron en noveno lugar con Yo quiero bailar la canción empezó a sonar de manera insistente en la segunda edición de ‘Gran Hermano’ y se convirtió en el auténtico pelotazo de aquel verano.
Durante años las dos cantantes han vertido malas palabras la una sobre la otra: su enemistad estaba enquistada. En este tiempo Selena, la morena, ha sido la más beligerante: “La compañía discográfica tomó la decisión de invitarla a salir del proyecto”, declaraba hace algún tiempo sin querer entrar en detalles, si bien en otra comparecencia mediático insinuó que su compañera no cumplía con los estándares de profesionalidad. “Me gusta hacer las cosas impecables... Y todo lo que se salga de ahí ya crea conflictos. La impuntualidad, la falta de profesionalidad, la poca consideración con el resto del equipo... Pido respeto y quiero recibir lo que doy”, declaraba en evidente alusión a su compañera.
Sonia, por su parte, utilizaba eufemismos para comentar que aquello era un problema de egos y que no soportaba a su compañera: “Nos separamos porque teníamos puntos de vista diferentes, percepciones de la vida y de la música muy distintas y esto es como lo que yo siempre digo: te casas pensando que conoces a tu pareja pero luego te puede ir muy bien o te puede ir muy mal y, en este caso, nuestra compatibilidad no era la idónea”, contó a El Español hace tan solo un año en una entrevista en el que negaba categóricamente la posibilidad de un regreso.
Tras la escisión ambas intentaron triunfar con carreras en solitario, pero sus temas nunca lograron la misma repercusión que sus tonadas conjuntas. Por ese motivo han compaginado lanzamientos de nuevos temas con otras actividades: durante un tiempo Sonia creó su propia firma de ropa y complementos y realizó un curso un máster en Protocolo y Relaciones Públicas. Selena, por su parte, ha trabajado durante estas dos décadas como coach vocal, actriz de doblaje y terapeuta alternativa.
El auge de los festivales nostálgicos activó las agendas de actuaciones para ambas que actuaban por separado en diferentes eventos cantando las canciones que un día interpretaron juntas. Tras varios años haciendo piruetas porque si contrataban a una debían prescindir de la otra los promotores empezaron a proponer una unión que se traduciría en beneficios económicos para todas las partes.
Sin embargo la versión oficial resulta menos materialista: “Hemos querido unirnos para cerrar un ciclo en nuestro 25 aniversario, y regalaros a todos nuestros seguidores el deseo de vernos nuevamente juntas”, dicen en su página oficial.
Sea como fuere, las dos mezzosopranos del dance están de nuevo juntas dispuestas a regalarnos en conjunto sus temas de siempre porque no todo es “Yo Quiero Bailar”: también firmaron otros éxitos notables como “Deja que mueva” (una mano en mi cintura, deja que mueva, mueva, mueva…) o “Mucho por vivir en Gran Hermano” (que rezaba aquello de “En Gran Hermano, alguien te dará la mano) o “Que viva la noche” .
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