La vida personal de Aitor Esteban, nuevo presidente del PNV: una mujer en política y dos hijos

El portavoz del Partido Nacionalista Vasco en el Congreso de los Diputados, Aitor Esteban, ha abandonado hoy sus funciones en el hemiciclo de la soberanía nacional para hacerse cargo de la presidencia de la formación independentista. La prensa tradicional concede estos días largos editoriales sobre su trayectoria política, pero nosotros vamos a centrarnos en su vida personal.

Casado con una histórica de la formación vasca

Abogado de profesión e hijo de una soriana y un vasco, Esteban tiene en la actualidad 62 años (soplará las velas el próximo 21 de junio). Está casado con otra importante representante del nacionalismo vasco de derechas: Itxaso Atutxa. Hija de un clásico dirigente de la formación, la mujer de Esteban fue la primera mujer en ostentar la presidencia del PNV en Bizkaia, cargo que ostentó desde febrero del 2013 hasta el pasado 23 de noviembre. Con mucha voz dentro del partido gracias a su pedigrí, la esposa de Esteban ha sido durante mucho tiempo "la jefa" de su famoso marido.

Dos hijos, un graduado en derecho y otro rockero

La pareja tiene dos hijos, Aritz y Oier, que no han continuado la carrera política de sus progenitores y mantienen un perfil discreto. Aritz, graduado en derecho, ha consagrado su trayectoria a la gestión deportiva y en la actualidad es el director de Operaciones del Barakaldo Club de Fútbol tras haber pasado por el Eibar o haber prestados servicios en los servicios institucionales de la Liga Española.

Oier, por su parte, ha mantenido una trayectoria menos convencional y centra sus intereses en el mundo de la música. Según su perfil de Facebook, que está bastante desactualizado, fijó su residencia en Barcelona y toca la batería con diferentes formaciones de rock. Aunque no lo publicita mucho, este amor por la música le viene por parte de padre. Aitor Esteban tiene un lado melómano y es un gran aficionado al rock clásico. Se le ha oído mencionar en círculos cercanos su gusto por bandas como los míticos Rolling Stones o, como no, grupos vascos como Itoiz. En una entrevista informal llegó a comentar que "un buen riff de guitarra puede aclarar la mente mejor que un discurso”.

Aitor Esteban fue jugador de rugby

Además de abogado y político independentista, Aitor Esteban también ha sido jugador de rugby. En su juventud fue uno de los principales activos del Bilbao Rugby Club. Según ha contado en numerosas entrevistas, este deporte le enseñó valores como el trabajo en equipo y la resistencia, y a menudo lo usa como metáfora política. Por ejemplo, ha comparado su estilo de liderazgo con el famoso "drop" de Jonny Wilkinson en la final del Mundial de Rugby de 2003, en referencia a la importancia de la precisión y el momento adecuado.

Carácter campechano y afable

Como buen vasco, Aitor tiene fama de ser muy cercano con sus compañeros del Congreso de los Diputados. Entre los periodistas del congreso circula una anécdota que dibuja muy bien su carácter: durante sus años en la capital, ha tenido la costumbre de llevarse pinchos o pequeños aperitivos al Congreso. En una ocasión, durante una sesión maratoniana, se le vio compartiendo un pincho de tortilla con un compañero de partido en los pasillos, un gesto que rompió la solemnidad del momento y que él justificó diciendo: "Aquí también hay que comer, que no todo es hablar".

En el Congreso, Esteban también se ganó cierta fama por su estilo sobrio pero peculiar. Durante los inviernos, solía aparecer con un jersey de lana gris que, según él, le tejió su madre hace años. Este detalle lo humanizó ante los medios, que de manera interna lo apodaban "el diputado del jersey" en tono cariñoso, aunque él insistía en que era "cómodo y punto".

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