Famosas bien operadas: la otra cara… de la moneda
Oteradas rompe hoy una lanza en favor de los licenciados en medicina que ejercen como profesionales de la cirugía plástica, estética y reparadora. De un tiempo a esta parte, los medios y la opinión pública tienen la fea costumbre de echar por la borda los retoques de las celebridades aduciendo falta de naturalidad o negligencias estéticas. Este blog, rebelde y pionero por naturaleza, ofrece hoy el análisis de la otra cara de la moneda: las famosas que han mejorado su imagen gracias al buen hacer de sus cirujanos. ¡No todo son Donatellas!
Elsa Pataky, no tenía más narices
La consagración de Elsa Pataky como estrella internacional no se debe sólo a papeles cinematográficos o directores talentosos, también se debe a su cirujano plástico. La actriz comenzó su carrera en la teleserie juvenil ‘Al Salir de Clase’ y su físico parecía perfecto. Sin embargo, gracias a una rinoplastia, éste incluso mejoró: la curvatura del caballete de su napia se volvió mucho más armónica y hermosa.
Marta Sánchez, la que nunca se rinde
Marta Sánchez lo tiene claro: está a favor de obtener todos los beneficios que puede de la cirugía plástica. “¿Qué prefieres, subir una montaña en bici o en moto? Yo en moto, la verdad. Las que no se operan se lo pierden”, declara sin tapujos. Pómulos, labios, bótox y liposucciones son algunas de las operaciones a las que la artista se ha sometido y que ella no duda en reconocer. Todas estas intervenciones han conseguido mejorar algunas imperfecciones y hasta frenar el paso del tiempo.
Maria Teresa Fernández de la Vega, vice-botox
El cirujano plástico de la otrora vicepresidenta del Gobierno merece en mi opinión el Nobel de Medicina. Lifting, botox e inflitraciones vitamínicas han obrado el milagro de la belleza madura de la diva socialista. De la Vega lucía un rostro repleto de surcos que mutó en uno mucho más juvenil y saludable gracias a las manos expertas de un médico cirujano que debió trabajar su piel con el mismo mimo con el que un artesano restaura una talla religiosa del siglo XVIII.
Letizia de España, en estado de perfección… perfección de Estado
La Reina de España está operada, eso es innegable. De la misma manera que resulta evidente que estas intervenciones también han mejorado el rictus de nuestra monarca (por mucho que la cantinela habitual en las conversaciones sobre el tema sea el "a mi me gustaba más antes"). Mi compañera y soberana se ha modificado la barbilla y la nariz. Además se ha sometido a una blefaroplastia -remodelación de párpados- y ha corregido las arrugas con bótox y relleno de ácido hialurónico.
Lola Herrera, no sólo actimeles
La belleza madura de Lola Herrera a sus 79 años no se debe únicamente a los preparados lácteos que se toma para proteger sus defensas. La actriz también visita la consulta de expertos en medicina estética. “Me operé con el mejor”, dice sin tapujos.
Penélope Cruz, nariz de Alcobendas… nariz de Hollywood
No le gusta reconocerlo pero es un hecho: la cara de muñequita de Penélope Cruz es obra y gracia de la cirugía plástica. Repasando imágenes de archivo , podemos ver que el cambio de la alcobendeña más ilustre ha sido para mejor. La nuera de Pilar Bardem se ha afinado la punta de la nariz mediante una rinoplastia, algo que le ha servido para dulcificar el rostro y suavizar los rasgos.
Paulina Rubio, chica dorada y retocada
El quirófano ha sentado divinamente a Pau. A la Chica Dorada le ha venido muy bien esto de pasar por chapa y pintura y librarse de sus carrillos. Si vemos imágenes de los primeros años 90 y las comparamos con otras más recientes comprendemos que es de justicia reconocer que la cirugía puede hacer mucho bien por la estética femenina.