La nueva normalidad trae consigo un montón de separaciones entre las parejas del imaginario vip. El confinamiento que de la pasada primavera parece que ha pasado factura a nuestros famosos de cabecera y resulta sorprendente la oleada de separaciones que están haciéndose públicas en los últimos días. La última, y quizás más sorprendente, ha sido la de Paloma Cuevas y Enrique Ponce. Pero no es la única.
El coronavirus también se ha llevado por delante el matrimonio de Begoña Villacís. Hace unos días la vicealcaldesa de Madrid confirmaba su separación y su ya expareja ratificaba el cese de convivencia en una carta remitida al suplemento LOC. En la misiva, el ya ex consorte municipal afirma que no descarta darse "una segunda oportunidad, pero será complicado".
Tampoco ha superado la cuarentena coronavírica el noviazgo de Antonio Velázquez y Yohanna Alonso. Por lo visto, durante los cien días de convivencia forzosa, la campeona de thai boxing y el guapísimo actor descubrieron que tenían objetivos vitales diferentes. Yohanna, como deportista de élite y guardia civil, sigue unos hábitos de vida muy saludables y estrictos, y no podía seguir el ritmo de vida del actor, habitual de la noche madrileña. Ella le habría sugerido espaciar más las salidas nocturnas, pero para Antonio no había ningún motivo para dejar de acudir a los saraos.
Y más rupturas… Fiona Ferrer también se reincorpora a la nueva normalidad soltera. Según informa la revista ¡Hola!, su relación con el empresario sevillano Javier Fal-Conde ha llegado a su fin tras dos años. Según desliza el entorno del andaluz, la decisión la tomó él en plena cuarentena, tiempo que ambos pasaron alejados. La desconexión le permitió descubrir que estaba mejor alejado de la bella empresaria y tras hablar por teléfono, ambos decidieron dejar la relación.
Después de casi siete años de amor, tampoco siguen juntos Merche. En los últimos tiempos todo eran discusiones, había mucha tensión en la casa y no se llevaban bien", relata una fuente próxima a la ex pareja.