Las orejitas de soplillo generan complejo a más de uno. La presentadora Nuria Roca reconocía el hace poco en el programa de televisión en el que trabaja que de pequeña tenía los pabellones auditivos excesivamente salidos y pasó por quirófano para solucionarlo. No es la única que se ha sometido a una otoplastia, nombre clínico de esta operación.
La comunicadora explicaba que cuando era una niña tenía bastante complejo: “Salía de la piscina tapándome las orejas de soplillo y ahora lo sigo haciendo porque eso no se olvida... Sueño que se me despegan", declaró divertida.
Sergio Dalma también era uno de esos niños de orejas despegadas. “Mi madre me las pegaba con esparadrapo”, explicó en un programa de televisión. Con el paso de los años y gracias a una intervención médica solucionó ese problema que tan de cabeza traía a su madre.
El madridista Gareth Bale también se sometió a una otoplastia para terminar con su complejo en las orejas. Durante años el galés utilizó el clásico truco de taparse las orejas con el cabello pero terminó sucumbiendo a la intervención: Se trata de una sencilla operación con anestesia local que dura aproximadamente una hora. El postoperatorio no supera las 24 horas y, aunque molesto, no resulta doloroso.
El ex barcelonista Dani Alvés realizó el mismo cambio en su época como jugador culé. El lateral brasileño pidió permiso para incorporarse unos días más tarde a la pretemporada del equipo catalán en la temporada 2009-2010 para realizarse este retoque del que ha presumido en redes sociales.
Kiko Matamoros también ha pasado por este proceso. Una de las obsesiones del ex marido de Makike siempre han sido sus orejas. En el cambio radical al que el colaborador se sometió el pasado año hubo lugar para una otoplastia que pegó las orejas a su cabeza.
A pesar de que Zarzuela nunca lo ha reconocido, las orejas de Letizia Ortiz parecen haber sufrido algún cambio con el paso de los años. En los primeros años de la soberana como Princesa de Asturias parecía tener los pabellones algo más despegados de la cabeza comparados con cómo los tiene en la actualidad.
Anna Kournikova también era una ‘soplilla’ cuando era una niña. Después de pasar por el quirófano para hacerse una otoplastia, las orejas de la señora de Enrique Iglesias lucen mucho más discretas.