Llevamos unas semanas a cuestas con el término ‘fofisano’. Este neologismo, que viene a significar ‘incipiente barriga cervecera’, pretende dignificar la aparición de los primeros michelines en los otrora cuerpos atléticos. Leonardo DiCaprio se ha convertido en el embajador de este nuevo prototipo masculino, pero no es el único, ni mucho menos. Se acabó el tiempo de los musculitos, ha llegado la hora de la belleza masculina y natural.
En España tenemos tres grandes embajadores de la ‘fofisanez’ que fueron en su día tres ídolos juveniles de cuerpos ultradefinidos que, con los años, han mutado en atractivos cuarentones de divertida barriguita: Alejandro Sanz, Miguel Bosé y Javier Bardem.
En el panorama famosil español encontramos más ejemplos de celebridades ‘fofisanas’. Antonio Banderas, por ejemplo, también se ha unido a este selecto club. Francisco Rivera también parece estar dejándose embaucar por este movimiento en alza.
También triunfan en la televisión: Arturo Valls o Jorge Javier Vázquez, dos de los presentadores más queridos de la audiencia, son también claros ejemplos de la cultura fofisana que nos invade.
En Hollywood el fenómeno hace estragos y son varias las estrellas que han dejado el gym por las tapitas: Son varios los 'sex symbols' de toda la vida que parece que lucen algo más de 'flotador' sin ningún tipo de complejos: Gerard Buttler, Matt Damon o Ben Affleck se han dejado ver algo más ‘hinchados’ con respecto a lo que nos tenían acostumbrados.
La lista es larga y no podemos olvidar los casos de Pierce Brosnan, que desde que no ejerce de agente 007, está algo más dejado, o del cantante Michael Bublé. El icono musical de Divinity pierde unos cuantos enteros y tiene 'cuerpo fondón' cuando se queda en traje de baño.