La hermana de doña Sofía se ha convertido en los últimos tiempos en el mayor apoyo para la reina saliente. Pero, ¿quién es esta mujer que reside silenciosa y discretamente en el Palacio de la Zarzuela junto a la Primera Familia? La vocación informativa y didáctica de este blog no conoce límites: Oteradas retoma hoy su laureada faceta palaciega y monárquica para acercar a sus lectores a 'la tía Irene'.
Tras ese perfil ultradiscreto se oculta una mujer fascinante que guarda con celo algunos de los secretos de Estado más privados de Palacio. Su carácter único ha llevado al actual Jefe del Estado, el rey Felipe VI, a llamarla en la intimidad y de manera cariñosa ‘tía Pecu’ en referencia a lo 'peculiar' de su personalidad. “Soy la excéntrica y la rebelde de la familia”, declara en su biografía (La Princesa Rebelde, Eva Celada. Plaza & Janés. 2006).
Soltera, intensa, austera y vegetariana
Nuestra protagonista nació en el exilio de la familia real griega. Vino al mundo en Sudáfrica hace 79 primaveras, dos años antes que nuestra reina emérita. Posteriormente viviría con su familia en Italia, pero será una residencia en la India la que forjaría su carácter. Esta princesa griega es una gran aficionada al yoga, las energías y la medicina natural. También es una experta pianista. Vamos, que tiene un punto intenso importante.
Los hombres no interesaron nunca a la tía Irene y por eso no se casó. “He estado enamorada, naturalmente, pero no quiero contar ninguna historia de amor que he vivido por discreción”, mantiene en el libro que repasa su vida. Tampoco frecuenta salones de belleza ni viste de grandes diseñadores: lleva el pelo sin teñir, no usa maquillaje y le gustan las camisolas amplias y cómodas que luce con zapato plano.
Otras cuestiones han ocupado su tiempo y atención: comparte aficiones y criterios con su hermana Sofía. Como ella, es vegetariana y también le gusta disfrutar del arte y la música clásica. Su naturaleza discreta y huidiza le ha permitido estar junto a su hermana en grandes eventos culturales sin que nadie se percatase así que, poco amiga de los flashes, ha sabido evitar eso de aparecer en la foto.
El momento más duro de su vida tuvo lugar en 2002, cuando le detectaron un cáncer de mama. Luchó contra tan terrible enfermedad y la venció gracias a su tesón, el gusto por la vida sana y el tratamiento de quimioterapia. En un viaje a Atenas en 2008 se cayó y se fracturó dos dedos de un pie.
Admiradora de Letizia y agradecida a los Urdangarín
Irene de Grecia admira la labor que desempeña la nuera de su hermana y confidente, la reina Letizia de España. “Veo en Letizia maravillosas cualidades personales. Sabe que ha asumido un trabajo duro, lo entiende, y que no es estar todo el día en una fiesta”, declara.
Asimismo, más allá de las cuitas judiciales de su sobrina Cristina, celebra que le pusiesen su nombre a la benjamina Urdangarín: “Me sentí muy orgullosa cuando le pusieron ese nombre”, declaró hace años.
Solidaria hasta el tuétano
El arraigo a los valores humanos han llevado a Irene de Grecia a consagrar su vida a labores de caridad y beneficencia: es la presidenta y fundadora de ‘Mundo en Armonía’, una ONG que fundó “con el objetivo de trasladar excedentes alimenticios de Europa a zonas gravemente necesitadas”. La entidad trabaja para enviar ayuda a las zonas afectadas por catástrofes, construcción de infraestructuras que mejoren la calidad de vida de zonas deprimidas y ofrecer oportunidades educativas en zonas del Tercer Mundo.
Ya por último (y echándole muchísimo sentido del humor), nuestros compañeros de 'Cazamariposas' han recopilado esos momentos en los que Irene de Grecia ha intentado ser tan invisible que podría haber mutado en un 'fantasma'. ¡Pasen y vean!