En el mundo del corazón encontramos sagas que parecen acechadas por algún tipo de maleficio. La tragedia y el infortunio parece que se ceban con ellos y las tragedias se suceden. Pueden tratarse de dinastías familiares como Los Pantoja, los Kennedy, Las Campos o incluso a los intérpretes de la serie Glee.
Este verano fallecía víctima de un cáncer la esposa de John Travolta, la también actriz Kelly Preston. Este fallecimiento no es el primero que tiene lugar en el entorno del emblemático actor. Cuando Travolta estaba rodando 'Grease', su novia de aquel tiempo, la actriz Diana Hyland, falleció a causa de la misma enfermedad. Su hijo Jett, fruto de su relación con la malograda Kelly, nació en 1993 aquejado de autismo y constantes convulsiones. Jett aparecería muerto en la bañera de su casa de Bahamas en el año 2009, tras golpearse la cabeza con ella. Tenía 16 años.
Las continuas desgracias que asolan a Isabel Pantoja y familia también parecen fruto de algún tipo de mal de ojo. Los problemas solo empezaron con el trágico fallecimiento de Paquirri en Pozoblanco. Aquel infortunio fue tan solo el pistoletazo de salida de una vida marcada por la tragedia: problemas económicos y profesionales, traiciones continuas de su entorno, dos años en prisión, las adicciones de Kiko Rivera o la mala relación con su hija Chabelita parecen evidenciar su maldición.
Dice Jorge Javier Vázquez que las Campos viven acomodadas en la queja y la lamentación. Pero no es para menos… El marido de Maria Teresa se quitó la vida con un disparo en 1984. Desde aquel momento, la biografía de la veterana comunicadora y sus dos hijas han sido un vaivén de momentos felices y enormes tragedias. Por cada alegría que celebraban la vida les deparaba un golpe. Las tres han batallado contra un cáncer y las tres se han visto ahogadas por las deudas. Además cada una de ellas ha tenido que luchar con sus propios infiernos: el ictus de la matriarca, la pérdida de la custodia de sus hijos por parte de Carmen y los problemas económicos en el caso de Terelu.
La familia Reyzábal, a la que pertenece la cantantre Barei, es una de las más adineradas de España. A pesar del éxito empresarial, esta dinastía acumula un pasado marcado por los reveses del destino. Varios de sus miembros fallecidos cuando aún eran jóvenes: la última ha sido Ana Reyzábal, sobrina de la cantante, que fallecía en un accidente de canoa hace varias semanas. Eduardo, el abuelo de la adolescente fallecida, murió a los 45 años víctima de un cáncer de laringe. Fortunato, el padre de Barei, perdió la vida a los 42 tras sufrir un infarto cuando la cantante tan solo tenía un año de edad.
Los actores de la serie Glee podrían padecer este mismo sortilegio. Desapariciones, suicidios, sobredosis y todo tipo de problemas han perseguido a los protagonistas de la serie musical de Ryan Murphy. La senda maldita la iniciaba su protagonista en 2013. El actor Cory Monteith falleció a raíz de una mezcla de sustancias. Un año después una asistente de producción del serial se quitaba la vida y en 2018 el actor Mark Salling se ahorcó en un bosque después de ser acusado de recibir y poseer pornografía infantil. El pasado 11 de julio el cuerpo de Naya Rivera aparecía en el lago en el que había desaparecido pasando una jornada de natación con su hijo.
La 'familia real' americana, los Kennedy tienen una historia negra por todos conocida. En 1963, el presidente John F. Kennedy era asesinado en Dallas y tan solo unos años después su hermano Robert cayó abatido en Los Ángeles. Jackie, la primera dama viuda, trató de rehacer su vida, pero las maldiciones no sabe de millonarios y falleció en 1994 a causa de un linfoma que le descubrieron, accidentalmente, cuando cayó de su caballo durante una cacería de zorros. Cinco años después, perdía la vida su hijo John-John cuando cayó al mar la avioneta que pilotaba.
TE PUEDE INTERESAR:
-NAYA RIVERA SALVÓ A SU HIJO ANTES DE MORIR