Antonio Garay Gorro, el segundo hijo de Tamara Gorro y Ezequiel Garay, recibirá su bautismo este mismo fin de semana. La vida del pequeño ha estado bajo el foco mediático desde el mismo día de su concepción y no ha dejado de acaparar titulares y likes. Para celebrar el gran día del pequeño vamos a recordar todos esos momentos en los que el peque ya fue protagonista.

Después de muchos años intentando ser padres mediante técnicas tradicionales, la pareja de la extronista y el defensa valencianista había tirado la toalla e incluso había concebido a su primogénita mediante gestación subrogada. Por eso, el día en el que Tamara Gorro anunció que estaba embarazada, el mundo se paró: el milagro había sido obrado. “Ahora sí creo en los ángeles”, dijo su madre aquel histórico 28 de abril en el programa ‘Sálvame’.

A las 22 semanas de gestación la influencer comunicó al mundo el nombre del pequeño: Antonio. La decisión venía motivada por el homenaje que Tamara y Ezequiel querían realizar a un amigo de ambos recientemente fallecido. Esta era la mejor manera de honrar la memoria de alguien que estuvo al lado de ellos durante los 18 intentos fallidos de fecundación in vitro.

Los seguidores de Tamara vivieron como un auténtico tsunami cuando, embarazada de ocho meses, comunicó que el médico le había ordenado reposo absoluto. La alarma corrió como la pólvora entre los fans de la colaboradora y ésta tuvo que llamar a la calma a su “familia virtual”. “Estoy perfecta. El bebé está perfecto…pero, el bebé quiere salir ya y el médico me ha dicho “quietecita, porque hay que mantenerlo dentro”. No es más que eso”, declaró.

La primera fotografía de Antonio en Instagram fue prenatal. Tamara mostró en su cuenta una nítida ecografía donde se podía ver el rostro del bebé que aún crecía en su vientre. Ezequiel, la sujetaba por detrás con amoroso cuidado con sus manos entrelazadas sobre su abdomen.

En diciembre de 2017 tuvo lugar el feliz nacimiento de Antonio. Como es habitual en la familia todo lo relacionado con el parto fue retransmitido prácticamente en directo a través de las redes sociales de su madre. “Otro sueño cumplido, su papá fue el primero en cogerle, que sensación tan bonita al verlo”, confesaba la propia Tamara en su cuenta oficial de Instagram.

El papá de la criatura también es asiduo a compartir su vida más íntima en las redes sociales, donde presume de familia. Lo volvió a disfrutar el día que se tatuó la cara del pequeño Antonio en el brazo izquierdo. El valencianista subió a sus historias de Instagram el proceso del tatuaje de la cara del pequeño en su brazo izquierdo. Unos meses antes había realizado el mismo proceso con la faz de su primogénita, Shaila.

Tamara no quiso dejar pasar los primeros 30 días de vida del pequeño. En aquella fecha hizo pública una emotiva carta en la que se transmitía todo su amor: "Hace treinta días nos conocimos, nos pusimos cara. Lo primero que hice al verte fue darte las gracias por hacer posible, ese sueño ansiado. Y ahora que te tengo junto a mi, te sigo agradeciendo, la etapa tan bonita que me hiciste vivir”, decía.

Hace exactamente un año el pequeño tuvo su “bautizo profano” en las aguas de Ibiza. La familia se desplazó hasta la isla balear a pasar unos días de asueto. Los fotógrafos de la isla Pitiusa, siempre al acecho, captaron las imágenes del baño en el mar de Antonio junto a sus padres.

Tras el verano Antonio se enfrentó a otro momento histórico: el cole. El pequeño Antonio empezó la escuela infantil a la vez que su hermanita Shaila. “Ambos empiezan una etapa nueva, donde estarán más que felices rodeados de niños y profesionales. Todo es maravilloso pero ¿yo? Estpy ansiosa por recogerlos y ver cómo están, que tal se sienten, estoy nerviosa... pero sobre todo tengo un poco de nostalgia porque mis niños crecen y quiero que siempre sean mis bebés...", escribió en redes.

Si el primer cumplemés del niño fue histórico… ¡imaginen el primer cumpleaños! Tamara volvió a sacar su vena literaria y, renacentista y escribana, publicó una nueva misiva dirigida al pequeño: "Tú llegada fue especial, días antes de encontrarte dentro de mí, recibí uno de los golpes más duros de la vida. Desde ese instante ya comenzaste a entregarme felicidad...Tú conseguiste: Que volviese a confiar en mí misma, me mostraste el significado de lucha, cumpliste un sueño e hiciste posible el nombre de hermana. Y todo esto en un año y nueve meses que llevamos juntos y 365 días conociéndonos".