Oteradas escribe hoy un nuevo capítulo en la Historia del Periodismo. Ofrezco a mis lectores un material sensible y clasificado que los famosos no quieren que salga a la luz. He recibido presiones desde altas esferas de poder que intentaban evitar la publicación de este reportaje pero ante todo soy un comunicador valiente y me debo al enorme valor informativo de estos documentos: el pasado de algunos de los famosos con mejor reputación del país como chonis, canis, poligoneros y habituales de las macrodiscotecas de extrarradio. Va por ustedes.
Gabriel Rufián, ¡qué pasa neng!
El diputado más polémico del Congreso de los Diputados tiene un pasado de look makinero fascinante. Antes de convertirse en la voz del separatismo catalán en el hemiciclo Gabriel fue tan solo un joven charnego de Santa Coloma de Gramanet con estética bakala. Su pelo decolorado y sus gafas de cristal tintado arrasaba entres las chicas de las discotecas de Casteldefells.
Cristina Pedroche: “Me gustan los chandaleros y Camela”
La guapísima Cristina Pedroche siempre ha reivindicado su pasado choni: “El barrio tira. Me he criado con las canciones de ‘Camela’. Para mi está el rayo Vallecano, los chandaleros y ‘Camela'”, declaró en una ocasión. Esta imagen de la presentadora junto a su madre, que ella misma también colgó hace unos años en sus redes sociales, ilustra su afirmación. En ella la vemos con un look que partía la pana entre algunas adolescentes hace una década.
Sergio Ramos, de peor a mal
Si algunos de los looks actuales de Sergio Ramos generan chanza y burla en Internet, de los de su juventud mejor ni hablemos. El marido de Pilar Rubio era la viva imagen del chonismo imperante durante la década pasada: rosarios al cuello, perlas a lo Beckham en las orejas, estampados imposibles… Por mucha risa que provoquen sus estilismos de hoy en día, el sevillano ha mejorado una barbaridad.
Úrsula Corberó, Lore-Lore-Macu-Macu
No siempre el pasado choni es negativo. El look periférico de Úrsula Corberó le sirvió para obtener su primer papel interpretativo de calado en la serie ‘Física o Química’. Tras aquel personaje, que a tenor de sus estilismos en las alfombras rojas de la época traspasaba los límites del set de grabación, vendrían otros logros profesionales.
Miguel Ángel Silvestre, miembro perdido de Fórmula Abierta
Antes de convertirse en El Duque y posteriormente en uno de los actores más guapos y con mayor proyección del país el guapísimo Miguel Ángel Silvestre era un Mister Castellón con look de triunfito de primera generación: cejas depiladas, anchas camisas vaporosas… ¡Parecía un miembro perdido de Fórmula Abierta!
Anna Simón, en el call TV de madrugada
Anna Simón es una de las mejores presentadoras de la televisión actual. También una de las más guapas y estilosas. Sin embargo, el pasado televisivo de la rubia esconde unos inicios de estética complicada: era presentadora de un call tv de madrugada. ¿Se acuerdan de aquellos concursos que se emitían a las tantas con preguntas absurdas y presentadoras gritonas y excesivas? Pues la catalana era una de ellas. En honor a la verdad Anna era de las más elegantes del formato.
Mario Casas, cani de manual
El guapísimo Mario Casas también tiene una adolescencia para el olvido. El actor gallego lucía de esta guisa hace una década. El paso de los años (y de la moda) ha ido depurando su estilo hasta convertirse en el tiarrón que es hoy en día.
Pelayo, carne de Tuenti
El ex coach de Cambiame, Pelayo Díaz, también tiene un pasado: En los terribles primeros años del milenio lucía un peinado ‘cani’ propio de fan fatal de UPA Dance. Por suerte para el mundo de la moda, el asturiano recondujo sus criterios y ya no es tan circa.