Desde que se convirtió en el rapero moda de Estados Unidos y en el marido de la mujer con las curvas más sensuales de América (Beyoncé), el dueño del sello discográfico Roc Nation prepara con todo el secretismo del que es capaz el Brunch pre-Grammys más glamoroso de Hollywood. Este año, Jay Z no ha defraudado.
Muchos de los invitados se enteraron del lugar y la hora el mismo sábado por la mañana. Entre los invitados estelares, dos de las 'protegidas' musicalmente hablando de Jay Z: Rihanna y Rita Ora. Jay-Z recibió a sus invitados en una mansión alquilada para la ocasión con catering de lujo y el enfundado en smoking y con un puro kilométrico. Hasta la fiesta se acercaron, entre otros Shakira, Timbaland, también estrellas de la música cuyas carreras están conectadas profesionalmente con Jay-Z.
Tan solo 24 horas después, Beyoncé se embutía en un espectacular vestido blanco con transparencias para disfrutar de los Grammys que conseguía la discográfica de su marido. Con todo, la espectacularidad de Beyoncé, fue en cierto modo eclipsada por los interminables escotes de la noche.
Julia Roberts ES_PEC_TA_CU_LAR con un Elie Saab dejó boquiabiertos a los asistentes a la 56 gala de los Grammys. Y no fue la única, impresionante Taylor Swift durante su actuación musical con un vestido de doble escote (infinita la espalda) en tonos nude, de inspiración griega que, junto a su actuación fue de lo mejor de la noche.
Katy Perry (la artista con más seguidores del mundo en Twitter, de hecho Google cuenta con un servidor propio para ella) apareció en la alfombra roja con un vestido en gasa y organiza lleno de notas musicales, y como no, otro escote imposible. Esta claro, esta primavera / verano regresan los escotes para las noches más especiales.