El clan Kardashian está acostumbrado a situarse en el centro de la polémica. La última la ha protagonizado Kim Kardashian y tiene que ver con un asunto sobre el que cada vez existe más conciencia y sensibilidad: el peso.

La empresaria ha subido un par de vídeos a sus stories de Instagram compartiendo los últimos "halagos" que ha recibido. Sentada junto a sus hermanas y probándose ropa, Kim ha recibido varios comentarios por parte de Kendall Jenner: "Estoy preocupada porque creo que no estás comiendo. Estás tremendamente esquelética", le ha confesado. La reacción de Kim ha sido de enorme alegría ante las palabras de su hermana: "¿Qué? ¡Oh, dios mío! ¡Gracias!", ha chillado. Khloe ha querido aportar su opinión al debate: "Nunca he visto un ser humano que luzca tan bien. Eres una muñeca andante". "He bajado hasta las 119 libras (53 kilos)", ha reconocido una risueña Kim.

Muchos han interpretado que Kim ha hecho apología de la extrema delgadez, y a la influencer le han llovido las críticas. Lo cierto es que no es la primera vez que el clan Kardashian acapara titulares por una cuestión de este tipo: Khloe admitió en su día que su familia le había obligado a adelgazar: "Me dijeron: 'Tienes que perder peso porque estás dañando la imagen de la marca", fueron sus palabras hace unos meses.

Las muestras de júbilo ante su bajada de peso han inundado las últimas publicaciones de Kim con comentarios de todo tipo. La preocupación por el posible mensaje que se envía a jóvenes y mujeres de todo el mundo es lo que ha motivado a muchos a posicionarse: "Estar anoréxica no es un piropo, es una enfermedad que arruina vidas y mata", ha sido uno de los mensajes más compartidos. Y la indignación ha llegado también al mundo vip: varias han sido las caras conocidas que han afeado la alegría de la empresaria.

La actriz Stephanie Beatriz, conocida por su papel en la serie 911, ha compartido su propia experiencia en sus stories de Instagram: "Solo ha habido una vez en mi vida en la que pesé 119 libras. Estaba justo en el medio de una terrible relación, con un intenso desorden alimenticio, y pensaba que incluso adelgazando más, estaría más guapa. Todo el mundo me felicitaba por mi aspecto". La presentadora de la BBC Jameela Jamil ha compartido un texto en el que reflexionaba sobre la poca importancia que debería tener el peso en la vida de cualquiera: "¿Cuánto pesaba Rosa Parks cuando se sentó en el asiento de aquel autobús? ¿O Malala Yousafzai cuando empezó a escribir sobre la vida de las mujeres pakistaníes bajo la ley talibán? ¿No lo sabes? ¡Exacto, eso es! ¡Porque no importa!".

La actriz Emmy Rossum, por su parte, también ha querido aportar su testimonio: "La única vez que pesé 119 libras fue cuando tuve mononucleosis. En la sesión de fotos de una revista todos alucinaban con lo bien que me sentaba", ha denunciado. Rossum también ha rebatido una cita popularizada por Kate Moss, "Nada sabe tan bien como estar flaco", contestando una lista de cosas que, en su opinión, saben mejor: el queso, el helado, las patatas fritas, la paella o la tarta de zanahoria.

Mientras tanto, Kim, que ha vuelto a ofrecer nuevo cambio de look con un corte de pelo tipo blunt bob, ha permanecido ajena a la polémica. No solo ha mentenido el vídeo de sus stories pese a las críticas, sino que, además, ha subido varias publicaciones en sus cuentas en las que ha dejado ver el estado actual de su forma física, con varias fotos en biquini y con ropa ceñida.