Existe vida más allá del biquini y el clásico bañador
Tras años intentándolo, parece que por fin es este el verano en el que el triquini tendrá su espacio en el armario de las celebrities más exhibicionistas. No se trata de una prensa fácil, apenas nadie más allá de Ana Obregón se ha atrevido con él ante las cámaras, pero el tercero en discordia (no sólo el biquini o el bañador tienen derecho a existir) puede pegar fuerte este año.
Con el buen tiempo, el vestuario playero sufre una renovación (algunas sólo cambiamos los bañadores y biquinis a un cajón más próximo, pero eso no viene ahora al caso) y parece que algunas 'fashion victims' han caído este año en la tercera vía: la "nueva" moda invita a lucir más cuerpazo.
El caso de Paris Hilton(como siempre, por otro lado). Ella siempre incluye triquinis en su maleta y, a veces, hasta los pierde. Aunque, ya se sabe, es una prenda complicada incluso para complexiones que se lo puedes permitir (fíjense si no, cómo parece que ha comido bien al ponerse el verde).
También le han visto el lado cómodo Kim Kardashian (las caderas de reality más deseadas de los estates) y Rihanna. A ellas eso del moreno no les importa tanto, otro punto importante a tener en cuenta para cualquiera que se lance a la aventura tiene que ver con las marcas del sol que puede dejar si se alterna con biquini.
La que parece haberle pillado el punto y no quiere soltarlo es Ana Obregón. Ella, que cada año trata de mostrarnos un nuevo posado (más joven, más guapa, más de todo...), ha preferido en los últimos tiempos optar por hacerlo en triquini. Y no por presumir de cuerpazo (que también), sino por la coquetería de esconder una cicatriz que dice que tiene desde pequeña.
Hay un sector que claramente sigue apostando por el biquini: las embarazadas. Ese grupo de mujeres que, por cierto, se están convirtiendo en lobby hollywoodiense, han obviado la nueva tendencia.
Si la nueva tendencia se hace con un nuevo cuerpo, los triquinis más 'in' están en colecciones como la de Yammamay, Andrés Sardá, Red Carter, Victoria's Secret. O gamas más económicas, como la siempre socorrida Primark. ¡Adelante valientes!