Hollywood se rinde a sus pies en el 85º aniversario de su nacimiento
El escritor Truman Capote la describía como "una hermosa criatura" cuando la propia Marilyn le preguntó qué diría de ella. A día de hoy, 49 años después de su fallecimiento (y 85 de su nacimiento) nadie ha sido capaz de mejorar el calificativo. Tampoco otra actriz ha conseguido elevar un perfume a la categoría de mito con solo mencionarlo (no será porque las demás no lo hayan intentado. En Dior hasta la han incluido en su última campaña, al lado de Marlene Dietrich y Charlize Theron). El caso es que la rubia oxigenada por antonomasia sigue siendo un misterio sensual, una bomba sexual y todo un referente para un Hollywood más bien seco de superestrellas del celuloide.
Quizá por eso este año (y previsiblemente también el siguiente, con el 50 aniversario de su fallecimiento) tendremos versiones de Marilyn Monroe para todos los gustos. Su dedo de Midas tocará producciones visuales, sonoras y hasta en tres dimensiones. Quien la prefiera de cartón piedra y tamaño XXL, por cierto, puede acercarse a Chicago a ver su nueva escultura gigante. Eso sí, avisamos que ha sido calificada como la obra de arte más fea de todos los tiempos por una web turística.
Para verla encarnada en una mujer del S.XXI basta hacerse con la edición de octubre del Vogue Americano para ver a una Michelle Williams metidísima en el papel. Bien es cierto que las razones son justificables: está rodando una película sobre la cantante... lo que no esperábamos es que trasladara su papel de la ficción a una portada real. Antes, y sin motivos tan sólidos, se inspiraron en su inconfundible estética otras como Lindsay Lohan para New York Magazine o la mismísima Agyness Deyn y nos regalaron sendas portadas Marilynianas. Eso es escuela y no lo de Maradona.
Pero no solo de portadas vive el hombre. En la música, la famosa felicitación a JFK (que volvió de los nervios a Jacqueline Kennedy) la han replicado desde Portia de Rossi a Jennifer Lopez. Al fin y al cabo... ¿qué Cumpleaños Feliz podría ser más sensual?
Las hay abonadas al "truquito Marilyn" en eso del estilismo. Scarlett Johansson lo hizo a las órdenes de D&G para promocionar su línea de maquillaje, mientras que Lindsay (una vez más, y con brazalete de presa en un tobillo) recreó la famosa escena de La tentación vive arriba para una película. Anita Obregón, por su parte, festejó así el aniversario de Ana Rosa el pasado año (Anita es una de las que disfruta disfrazándose de Marilyn cada vez que puede).
Ni que decir tiene que otra de las dopplegangers Marilyanas más famosas es Paris Hilton. La heredera, mitad Barbie Malibú, mitad bomba erótica de tercera regional, tampoco duda en disfrazarse de la famosa actriz a la mínima de cambio. Y en medio de toda esta fiebre rubia, hay una baja considerable: Megan Fox está borrando el tatuaje que tenía de la mítica actriz. ¿Preludio de un 2013 con otros mitos por celebrar?