París fue el lugar donde Luis Fonsi y Águeda López se prometieron, por lo que el listón estaba bastante alto. Ellos pusieron toda la carne en el asador y en 2014, un año después de su compromiso, se juraban amor eterno en un viñedo en el Valle de Napa. 

Un rincón lleno de encanto y con ese toque romántico que ha ido acompañándoles a lo largo de toda su relación. Ese mismo lugar fue el destino de su primer viaje como pareja, cuatro años antes de su ‘sí, quiero’. 

El cantante puertorriqueño y la modelo española se conocieron en el año 2010, él se encontraba en pleno divorcio con Adamari López y Águeda se había mudado a Estados Unidos para lanzar su carrera.

Fue durante una sesión de fotos en Miami, pero no se trataba de una sesión conjunta, cada uno estaba realizando un trabajo diferente. Luis vio a Águeda y le gustó, un flechazo que marcó el comienzo de una bonita historia de amor, que contó con la ayuda de un amigo que consiguió el teléfono de ella. A pesar de tener su número de teléfono, Luis optó por escribirle a través de Facebook.   

Seguramente ninguno de los dos podía imaginar que un encuentro fortuito culminaría en una relación con la que formarían una bonita familia. Poco después de comenzar su historia de amor, nacía su hija Mikaela, el 20 de diciembre de 2011, y la pareja quiso que la niña tuviera también un papel en su boda. 

Madre e hija vestidas de blanco caminaron hacia el altar, bajo la atenta mirada del cantante. "Ver a la niña caminar vestidita de blanco con su mami es una imagen que jamás olvidaré", explicó Luis Fonsi durante una entrevista para People en Español, que publicó un reportaje de su enlace. 

La novia escogió para su gran día un vestido de corte sirena de encaje y palabra de honor, con un cuerpo tipo corsé y con una gran cola. Le añadió un toque de color gracias al ramo de flores, rosas de un impactante color rojo, combinación de colores que se repitió en otros elementos durante la boda, como en la tarta. Águeda llevó el cabello recogido en una coleta trenzada. 

A pesar de ser una celebración por todo lo alto en la que no escatimaron en detalles, Luis y Águeda tuvieron un enlace muy privado, rodeados de sus familiares y amigos más queridos. La familia de la modelo no dudó en viajar hasta California para poder estar junto a ella en un momento tan importante. 

Esta boda fue solo un punto y seguido en su relación, así como en la historia de su familia, porque cinco años después del nacimiento de Mikaela no solo celebraron el cumpleaños de la pequeña, también la llegada al mundo de Rocco, su hijo pequeño. “Ellos dos… nuestra vida entera, los que nos enseñaron lo que es amor incondicional… Mis dos mejores composiciones. Se aman tanto que decidieron nacer el mismo día”, publicaba la pareja en sus redes sociales para celebrar a sus hijos.