¡Gonzalo Sierra y Elena Furiase ya son marido y mujer! La hija de Lolita puso el broche de oro a su historia de amor el pasado 18 de septiembre tras aplazar la ceremonia, como muchas otras parejas, por culpa de la crisis sanitaria. La pareja, cuyos caminos se entrelazaron gracias al hermano de la novia, contraía matrimonio en un enlace blindado a la prensa, que sí pudo captar el desfile de rostros conocidos que se desplazaron hasta la lujosa Finca Montenmedio, en Vejer de la Frontera. Más de 200 invitados disfrutaron de una velada que se extendió hasta altas horas de la madrugada, entre los que se encontraban Antonio Carmona, Yolanda Ramos, Ana Milán, Pepón Nieto, Esmeralda Moya o el presentador Juan y Medio.
Uno de los grandes secretos era, como en cualquier boda común, el vestido de la novia. Elena, muy emocionada, llegaba al altar del brazo de Guillermo Furiase, su padre, ataviada con un diseño del gallego Roberto Diz: un dos piezas formado por blusa y falda confeccionada al bies con cinco mantones de Manila en color crudo bordados a mano, según detalló el diseñador a la revista ¡Hola!, cuya inspiración la encontró en las raíces flamencas de Elena.
“No hay que olvidar de quién es nieta y que pertenece a una dinastía que reina en el arte de este país. Con su look hemos querido rendir homenaje a su abuela, la gran Lola Flores, y a su familia”. No fue el único guiño en su estilismo. Elena honraba su abuela, la Faraona, llevando unos pendientes elaborados a partir de uno de sus collares. Recuerdos que habrían unido a parte de la saga, ya que Lolita y Rosario también llevaron joyas y prendas de la cantante en esta cita tan importante.
Según informaba su revista de cabecera, que previsiblemente recogerá los mejores momentos de esta ceremonia en próxima edición, pasadas las 13:42 de este sábado, el músico y la actriz se daban el esperado ‘sí, quiero’. Unas simbólicas palabras que, en primer lugar, salían de la boca de Gonzalo para alivio de la flamante novia, que exteriorizaba un “menos mal” provocando la carcajada de los asistentes. Cuando llegó su turno, como reflejo de lo enamorada que está de su ya marido, Furiase, mirándole fijamente a los ojos, repitió la misma frase hasta en tres ocasiones: “Sí quiero, quiero y quiero”.
Tras el suculento banquete arrancó una fiesta en la que, como no podía ser de otra manera en la saga de los Flores, no faltó el cante y el baile. Antes de que el matrimonio iniciara el jolgorio con el baile nupcial, las mujeres más importantes en la vida de la intérprete, Lolita, su tía Rosario, Mariola Orellana y sus hijas, la madre del novio y varias amigas, se echaron a la pista para protagonizar una irrepetible e inolvidable escena. El grupo se animó a cantar una versión de ‘Eres tú el príncipe azul que yo soñé’, tema de la película de Disney ‘La Bella Durmiente’, sorpresa que hizo que se le saltaran las lágrimas a Elena, que tenía preparado un segundo vestido para esta parte de la noche.
La máxima de este segundo atuendo, obra del mismo diseñador, era la comodidad de su dueña. La prenda se componía de una parte superior con escote bustier (elaborado con la misma tela que el primer vestido) y una falda midi en tafetán de seda blanca de vuelo. No fue lo único que cambió en su imagen. Si bien en el primero, la joven llevó el pelo recogido en una coleta, para este segundo prefirió una melena con volumen semirrecogida con trenzas.