Para nadie, dentro de lo que cabe, es complicado imaginarse su look nupcial soñado incluso con sumo detalle. Podemos imaginar hasta la forma en la que iríamos peinadas y maquilladas, pero en este aspecto, hay un punto que es el que hace que en nuestra mente se produzca un cortocircuito: ¿cómo me pinto las uñas? Y es que colores de uñas hay muchos, pero solo algunos casan con el look nupcial y los demás pueden hasta arruinarlo.
Después de ese bloqueo momentáneo surge la pregunta obligada, y es que, ¿cuáles son los colores de uñas de novia? No es de extrañar que nos hagamos este tipo de preguntas porque las tendencias en manicura en general y colores de uñas en particular cada vez son más llamativos y extravagantes. Eso sin contar el 'nail art', que ha vuelto las uñas estampadas con todo tipo de dibujos, de flores a 'animal print', y hasta pedrería la tendencia más obligatoria en lo que a manicura se refiere.
Por supuesto, estos estilos no encuentran su lugar en los estilismos nupciales, pero las uñas de novia también cuentan con sus propias tendencias. De hecho, hay ciertos colores de uñas que encabezan la lista de ellas y hay más posibilidades de las que podemos imaginar y que van más allá de la clásica manicura francesa, que es a la que las novias terminan recurriendo y siempre estará en el top de uñas de novia. Aquí hemos recogido los cinco que más están dando de qué hablar entre las novias del momento: rosa pastel, blanco perlado y hasta burdeos.
Este es, junto a la manicura francesa, uno de los colores de uñas de novia por excelencia. Normalmente, las uñas de novia suelen ser discretas por lo que los colores de uñas de novia suelen ser sutiles y dar sofisticación y hacer que las manos y las uñas parezcan más limpias y finas. Por eso, el blanco perlado se convierte en uno de los colores de uñas favoritos en este sentido. Da brillo y un poco de color a las uñas, que las convierte en una joya más de nuestro look con ese estilo nacarado pero sin llamar la atención demasiado para no restar importancia al estilismo de la novia ni tampoco a los anillos, de compromiso y la alianza, ni a al ramo de flores.
No son muchas las novias que llevan las uñas sin pintar, pero sí las que prefieren dar solo un toque de brillo o apostar por un color de uñas lo más natural posible, como el rosa nude. En definitiva, que parezca que no se llevan pintadas, sino que son nuestras propias uñas, aunque de aspecto más suave, liso y brillante. Este color, al no ser un rosa demasiado fuerte, consigue también que las manos se vean limpias despejadas y más finas y si se trata de una boda de verano se potenciará el moreno aunque no lo haga excesivamente, sino sutil para respetar la sofisticación del look de novia.
En esta misma línea se encuentra el tono marfil. Este se presenta como una opción de blanco pero que no es brillante como el perlado pero tampoco demasiado opaco como el blanco que lucimos en nuestras uñas en verano que resaltan el moreno y se ven más con él. Es ese que se ha convertido este año en el blanco perfecto para invierno, el de las 'milky nails', ese que parece que nuestras uñas se han bañado en una especie de crema o directamente se han dado un baño de leche. Este blanco, al ser menos intenso, hace que las uñas se vean realmente despejadas y limpias las llevemos largas o cortas y además queda bien con cualquier tono de piel por claras que sean las manos. Otra de sus ventajas es que pega con cualquier estilo de vestido y color por el que apostemos y que, como el rosa pastel, no resta importancia a los anillos ni flores.
Si quieres ir un paso más allá y hacer que tus uñas tomen algo más de presencia en tu apuesta nupcial, aunque no exagerada, elige el tono champagne. Por supuesto, no se trata de ese color champagne metalizado ni lleno de brillo que es como suele entenderse ahora y que muchas veces con él corremos el peligro de caer en el exceso. Se trata de un color de uñas con un brillo sutil, similar a un tono perlado y con un toque de color que gira hacia el dorado haciendo que las uñas tomen personalidad en el look nupcial.
Hasta hace relativamente poco, los colores oscuros parecían totalmente prohibidos para las uñas de las novias pero ahora la tendencia parece ir en otra dirección. Cada vez son más las novias que dan presencia a su manicura con tonos como el burdeos, el negro, el marrón o el plomo, creando un contraste. Además, al ser colore sobrios, aportan elegancia, pero no restan protagonismo ni a flores ni a anillos, aunque es cierto que sí comparten el protagonismo.