· Tiara, vestido y día: reclamando su lugar como princesa
Los York son la familia más polémica de la corona británica. Divorcio y escándalos del príncipe Andrés y Sarah Ferguson aparte, sus hijas, Eugenia y Beatriz son conocidas por ser asiduas en saraos no estrictamente aristocráticos. Pero la pequeña de la familia ha reclamado su trono de princesa en su día especial con varios gestos. La elección de casarse un viernes y no un sábado, como hicieran William y Kate y entre semana, como hiciera su abuela Isabell II. Con una tiara de diamantes y esmeraldas rescatada del baúl de su abuela que vemos por primera vez. Y con un diseño de vestido 100% 'british' realizado por la firma inglesa Peter Pilotto.
· La cicatriz reivindicativa
El vestido con escote en uve dejaba al descubierto la cicatriz de su intervención de escoliosis que tiene desde los 12 años. Enseñarla en una ocasión así se ha convertido en un gesto de solidaridad que ella había explicado con anterioridad al enlace: "Soy patrona de la causa (en el Real Hospital Ortopédico Nacional donde ella se operó cuando niña)(...) verá el viernes, pero es una bonita manera de honrar a las personas que me cuidaron y una forma de defender a los jóvenes. Personas que también pasan por esto". Y remarcó la importancia de "enseñar tus cicatrices". El gesto se ha hecho viral y ha incitado a un movimiento en redes con el que muchas personas están enseñando sus cicatrices también a causa de esta operación.
El viento regalando las imágenes más divertidas
Lejos de la solemnidad esperada para un evento así, las fotos del arsenal de famosos sujetando tocados, sombreros y faldas voladoras han hecho las delicias de los internautas. Entre las afectadas por el fenómeno meteorológico, las dos ex novias del príncipe Harry, Cressida Bonas y Chelsy Davy (en la imagen), que entraban a la capilla entre risas.
· La lista de invitados: más 'it' que 'royal'
No solo las ex del príncipe protagonizaron la lista de invitados. Desde Kate Moss y su hija Lila, a Demi Moore, Liv Tyler o el cantante Robbie Williams, pasando por modelos e 'it girls' como Naomi Campbell y Pxie Geldof, Ricky Martin y su chico, Jwan Josef, y la protagonista ¿involuntaria?: Cara Delevingne con su tuxedo de Armani que desafiaba el protocolo y con el accesorio más comentado, el palillo de dientes en la boca que nadie entiende por qué llevaba.
· Sarah Ferguson, la sensación en Twitter
Sus múltiples cara, a cual más expresiva, han sido la comidilla en Twitter y carne de memes. La primera gran expresión que la ex 'royal' nos dejaba fue nada más bajar del coche saltándose el protocolo señalando a alguien que conocía entre el público y preguntando '¿¡Qué haces aquí!?". El otro 'highlight': su sombrero, el que muchos han tenido a bien comparar con otro elemento muy 'british': la snitch dorada del quidditch, el juego popularizado por J.K. Rowling en Harry Potter.
· El duelo no explícito de Meghan y Kate
A pesar de que ambas supieron mantener muy bien su segundo plano en el evento. El atractivo y la comparación van implícitas. Sus estilismos, ambos discretos, siguieron la norma sin llamar la atención. Al público le gusta posicionarse y los votos a favor del Alexander McQueen burdeos de Middleton o del Givenchy azul de Meghan (por cierto, el mismo color que eligieron las dos ex de su marido) se han disparado.