Si has decidido pasar por el altar será muy importante que tengas bajo control todos los detalles. Por eso, para ese día habrá que tener preparadas, entre otras muchas cosas, las alianzas. Es muy posible que si eres una persona a la que no le gustan mucho las joyas dudes sobre qué talla será la que más se ajuste a tu dedo. Para no llegar con prisa y para que no triunfen los nervios en el último momento será muy importante que los anillos se hayan probado, modificado y ajustado con anterioridad. Lo mejor será acudir a una joyería especializada, donde te darán todas las recomendaciones.
En el caso de los anillos de compromiso, hay muchas personas que deciden darle la sorpresa a sus futuras parejas y que, por eso, lo compran. Esto normalmente suele ser un error, ya que será muy complicado acertar con la talla. Aún así, si se quiere arriesgar, lo mejor será conocer bien las medidas de la persona para que no haya que devolver el producto o cambiarlo. Pero, ¿cómo se puede saber la talla de un anillo?
En el caso de que quieras dar una sorpresa a tu pareja y comprarle el anillo sin que lo sepa será muy importante que sigas una serie de consejos. Así, lo más recomendable será que seas bastante sutil. Tu objetivo será que ella no se entere de tus intenciones y, por eso, tendrás que buscar alguna excusa para conocer su talla. Podrás inventarte que quieres regalarle un anillo a tu madre o a tu hermana y que necesitas conocer un poco las medidas, aunque sea a groso modo. Para ello, puedes preguntarle qué talla de anillo tiene para que te hagas una idea. También, otra manera de triunfar será pidiéndole consejo a su grupo de amigos, ya que pueden saber mucho más de lo que imaginas. Y, además, también te podrán ayudar con el diseño.
También, podrás coger uno de sus anillos, que sepas que se ajusta a su talla, para hacerte una idea. Si temes que lo eche en falta siempre podrás hacer un pequeño boceto con lápiz y papel. En el caso de que estéis buscando vuestras alianzas de bodas y queréis tener una idea de vuestra talla podréis averiguarla gracias a tres sencillos pasos. Para ello, lo mejor será que busques en internet una tabla de medidas de anillo. Antes de nada, debes saber que un exceso de calor o de frío puede hacer que tus dedos se dilaten o se encojan, lo que afectará al resultado.
Lo mejor será que midas el dedo dónde sepas que te vas a poner el anillo y que lo hagas cuando tengas las manos calientes y, también, al final del día. Este momento será cuando los dedos estarán más hinchados y, así, te podrás asegurar que no quede demasiado ajustado. Ahora, para saber tu talla, deberás imprimir la tabla de medidas en una hoja y habrá que recortarlo. Luego, habrá que colocar el medidor de papel alrededor del dedo y fijarse en la medida que te ofrece. Para terminar, lo mejor será que busques la equivalencia en la tabla de medidas.
Otra opción será preguntar a un joyero cuál es la medida del anillo. El equipo de un lugar especializado te proporcionará la información necesaria para que sepas qué tallaje debes utilizar. Así, podrás llevar una de tus sortijas o anillos para que desde una joyería se hagan una idea de qué talla tienes.
También, podrás hacerte con una tabla de círculos de medidas de anillos, donde verás que hay dibujadas una circunferencia con diferentes tamaños. Ayudándote con un anillo, tendrás que colocarlo encima de cada círculo para observar cuál se ajusta más al tuyo.
Si tienes alguna duda, ya que el anillo podrá encajar en dos circunferencias, lo mejor será que te decantes por el más grande. En el caso de que haya que ajustar el anillo será más fácil si este es más grande, que si queda más ajustado. Así, gracias a estas sencillas formas podrás saber qué talla de anillo utilizas, aunque no sea lo más exacto posible. Aún así, siempre será más recomendable que vayas tú misma a la joyería, que pruebes los anillos y te decantes por uno u otro.