Celebrar una boda junto a una piscina es una de las grandes ventajas de casarse en verano. Estar al aire libre, dejar que las horas pasen y que la temperatura solo haga que mejorar, son factores que ayudan a que todo el mundo disfrute al máximo de la celebración, y si hay una piscina cerca, no se puede pedir más.

Además de refrescar el ambiente, las piscinas en las bodas pueden convertirse en uno de los mejores elementos decorativos con muy poco esfuerzo. La presencia del agua por sí sola podría ser suficiente, pero hay detalles que hacen que se convierta en el lugar más especial de toda la celebración. Aquí tienes las ideas que necesitas para decorar una piscina el día de tu boda y convertirla en un espacio único.

Si hay globos, hay una fiesta. Los globos son uno de los elementos más clásicos de la decoración de fiestas que, bien elegidos, consiguen dar un toque de lo más chic y desenfadado al entorno. Y todo ello sin perder ni un ápice de elegancia. Si el ambiente de la fiesta es divertido y muy festivo, puedes arriesgar por todo lo alto con globos de colores. Y si buscas que se integren a la perfección con el espíritu de boda, elígelos en color blanco y dorado.

Nos encanta verlos flotar sobre el agua, pero es raro que el aire, por poco que haya, no acabe haciendo volar a todos los globos. Para que esto no ocurra, asegúrate de que cada globo lleva un peso con una cuerda atada al extremo inferior. Después solo habrá que situarlos en la piscina de la manera que más te guste.

Las flores en las bodas son imprescindibles, y en una piscina, con arreglos que las hagan flotar, son espectaculares. Elige los arreglos florales que más te gusten, que vayan con la decoración o que coordinen con tu ramo de novia. Luego busca soportes que no se hundan en el agua, como planchas de espuma.

Puedes elegir solo flores para la piscina, o combinarlas con luces como las que te sugerimos más adelante. También puedes colocar un arco de flores que cubra el ancho de la piscina o adornar las escaleras y barandillas con tiras de flores y enredaderas.

Si la boda es de tarde, todo se llenará de magia y romanticismo si al caer el sol se encienden las velas en la piscina. Podéis colocarlas directamente dentro del agua, si son velas flotantes, o en soportes de madera, y también alrededor, rodeándola por completo. Pueden ir por separado, agrupadas, en centros florales… También dentro de vasitos de cristal, en farolillos o en candelabros. Lo importante es que armonicen al máximo con la decoración general de la boda.

Son una alternativa perfecta para las velas si no quieres estar pendiente de que se apaguen. Existen lámparas led flotantes que ofrecen una luz tenue ideal para crear un ambiente íntimo y especial el día de tu boda. Las puedes dejar con una iluminación fija o elegir que cambien de color e intensidad. Además, como no están fijas se desplazan por el agua creando diferentes juegos de luces.

Si cuentas con espacio alrededor de la piscina, una zona de chill out para vuestros invitados causará sensación. Si os encontráis en una finca o un espacio rural unos cojines de estética boho serán lo más. Una piscina junto a un lugar para sentarse cómodamente y charlar mientras anochece se convertirá en el sitio preferido de tus invitados. Y, por supuesto, no olvides una iluminación agradable de las que hemos mencionado anteriormente. ¡Será un éxito!

Este tipo de letras se han convertido en una de las tendencias más utilizadas en decoración de bodas, y si la celebración es de día puedes colocarlas en el jardín junto a la piscina para que destaquen como merecen. Y si es de noche, elige unas letras que se iluminen con luces led que se reflejen en el agua. El efecto será inigualable. En cuanto a lo que ponga en las letras, queda a vuestra elección: desde opciones clásicas como “love” o “amor”, hasta vuestras iniciales o el siempre elegante “just married”.