La decisión de vestuario de Leonor en Zaragoza: el guiño a su padre y otros detalles que han pasado desapercibidos

La princesa Leonor ha vivido hoy uno de los días más importantes de su vida como futura reina de España. A lo largo de la mañana, la heredera ha recibido la Medalla de las Cortes, el título de Hija de Predilecta de la Ciudad de Zaragoza y la Medalla de Aragón, máxima condecoración de la Comunidad. Antes de terminar su formación militar en la ciudad y, al igual que su padre recibió en 1986, la hija de don Felipe y doña Letizia ha sido homenajeada por las autoridades provinciales y Margarita Robles, ministra de Defensa. 

A pesar de ser un acto civil, la princesa Leonor ha elegido vestir su uniforme militar, al igual que hizo don Felipe hace 38 años atrás. La próxima reina de España, aunque podría haber elegido un look de calle, ha deslumbrado con su ya conocido uniforme compuesto por una chaqueta verde, camisa blanca y boina roja, además del clásico cordón rojo de cadete que atraviesa la chaqueta. A diferencia que en otras ocasiones, el uniforme de Leonor ha sufrido una pequeña modificación por ser cadete de segundo curso: dos ángulos en las hombreras y el pasador de la Condecoración de Carlos III encima del bolsillo derecho. 

Con esta decisión de vestuario, la Princesa de Asturias ha querido homenajear a su padre y vivir esta jornada tan importante y significativa como próxima Jefa del Estado con el uniforme de gala del Ejército de Tierra, demostrando su compromiso con la institución. Por no haber terminado aún su formación militar, la futura reina de España ha lucido una boina roja en vez de la conocida “gorra de plato” caqui, junto a un moño trenzado, uno de sus peinados favoritos cuando viste de militar, y pendientes de oro, detalles que han modernizado su look. En este día tan especial, doña Leonor de Borbón ha lucido por primera vez en la placa de su chaqueta sus dos apellidos, detalle muy significativo que no ha pasado desapercibido. A diferencia que sus otros compañeros cadetes, la futura reina de España colgado sobre la corbata negra el Toisón de Oro. 

En solitario y arropada por la ciudad de Zaragoza 

La princesa Leonor ha vivido esta jornada en solitario, sin la compañía de don Felipe y doña Letizia. Casualmente, la primogénita de los reyes ha sido condecorada con estos tres títulos honoríficos tan solo 24 horas antes de celebrarse el 20 aniversario de la boda de sus padres. Por este motivo tan especial, los monarcas han liberado sus respectivas agendas oficiales mañana.

A pesar de no haber asistido los reyes al gran día de su primogénita en Zaragoza, la princesa Leonor se ha dado un gran baño de masas en la ciudad y ha sentido el amor y cariño de toda la ciudadanía en este día tan significativo para la heredera al trono y el pueblo aragonés. De hecho, en su discurso al recibir la Medalla de Aragón, la máxima distinción de la Comunidad, en la catedral de la Seo de San Salvador, Leonor ha dedicado unas palabras de agradecimiento a los aragoneses y aragonesas por el apoyo que le han brindado estos meses: "He sentido el respeto y la amabilidad de los aragoneses que, además, me están acompañando en esta mañana tan importante para mí. Su apoyo ha sido y está siendo continuo. Estoy muy agradecida por lo que he vivido aquí durante este tiempo, por todo lo que me ha dado esta ciudad", ha dicho la princesa de Asturias. "Gracias Zaragoza. Gracias Aragón. Gracias a todos los que habéis hecho posible que en este tiempo me sienta una aragonesa más. ¡Gracias!".