Este 23 de junio se celebra el Día Nacional de Luxemburgo. Con motivo de ello, su capital se ha vestido de gala y ha celebrado un acto en la Filarmónica de la ciudad, donde Enrique de Luxemburgo ha emitido un comunicado con el que ha hecho oficial su decisión de un cambio de reinado.
Para sorpresa de los presentes en el emblemático edificio donde ha tenido lugar la ceremonia de apertura de la fiesta nacional, Enrique de Luxemburgo ha confirmado que nombrará al príncipe Guillermo como teniente representante el próximo mes de octubre. En la fecha mencionada, la institución comenzará una nueva etapa tras la cesión de las funciones a su primogénito que, sin embargo, no implican una abdicación por parte de su superior.
Después de las palabras con las que ha hecho oficial su dictamen, el cual ha señalado haber consultado antes con su mujer, la duquesa María Teresa, padre e hijo no han dudado en compartir un abrazo bajo la atenta mirada y vítores de los que se encontraban en el lugar.
Ya en abril, con motivo de su 69 cumpleaños, Enrique de Luxemburgo concedió una entrevista a Place Royale de RTL en la que, tras preguntarle si se había planteado la posibilidad de abdicar, ofreció unas pinceladas sobre los hechos que hoy ya son oficiales: “Creo que es muy importante dar una oportunidad a los jóvenes. La transmisión y la confianza son dos elementos esenciales en mi relación con mi hijo. En algún momento pienso retirarme. Eso es evidente”, expresó.
A través de las redes sociales oficiales de la monarquía luxemburguesa han lanzado un escrito en el que han hecho balance sobre lo mencionado: “El gran duque Enrique ha anunciado hoy que pasará la tenencia al gran duque heredero Guillermo en octubre de 2024. Las especulaciones habían estado circulando, pero ya es oficial, el gran duque Enrique se alejará de sus funciones. En octubre de este año, su hijo, el gran duque heredero Guillermo, asumirá el gobierno del país junto a su esposa, la gran duquesa heredera Stéphanie. Con toda mi suerte y confianza les deseo buena suerte. Debemos mirar al futuro con optimismo, sabiendo que juntos podemos lograr grandes cosas. El gran duque Enrique conservará su título oficial, ya que esto no es una abdicación. En lugar de eso, estará representado por su hijo el gran duque heredero Guillermo. El gran duque puede delegar sus poderes de manera temporal o permanente en un lugarteniente-representante. Antes de ejercer sus poderes, este lugarteniente-representante prestará juramento de defender la Constitución”.