El rey Felipe, sin Letizia, acude al funeral de su primo, Juan Gómez-Acebo

El pasado 12 de agosto, Juan Gómez-Acebo fallecía a los 54 años de edad víctima de un cáncer. La muerte del segundo hijo de la infanta Pilar y primo del rey Felipe suponía un duro golpe para la familia, que el 1 de marzo ya había tenido que afrontar la pérdida de Fernando, el hijo menor de los Duques de Badajoz, tras varios años de lucha contra una insuficiencia respiratoria crónica. Este domingo se ha celebrado el funeral del primero, pospuesto hasta la fecha para que pudiesen estar presentes la mayoría de familiares y amigos que en el momento en el que se produjeron los hechos se encontraban fuera de España, como es el caso de los reyes y las infantas.

Sobre las 12 horas, el círculo íntimo de Juan se ha reunido en el cementerio de San Isidro con motivo del funeral del fallecido. A las puertas, el rey Felipe se dejaba ver en solitario y sin la presencia de su mujer, la reina Letizia. Dentro, se ha reencontrado con su hermana, la infanta Cristina, con quien hace solo una semana ya aparecía en la boda de Victoria López-Quesada. Junto a ellos, han estado Miguel y Pablo Urdangarin y Alexia de Grecia. Del mismo modo, se espera la asistencia del rey Juan Carlos, que el pasado 6 de septiembre viajaba desde Abu Dabi y aterrizaba en la capital para poder asistir al acto. Laura Ponte, junto a sus hijos, Laura y Luis, también ha querido acompañar en el duro momento a su exmarido y padre de los anteriores, Beltrán Gómez-Acebo.

Es en la misma ubicación donde los restos del segundo hijo de la infanta Pilar reposarán en el panteón familiar junto a los de su hermano y sus padres.

El pasado 3 de marzo, cuando tuvo lugar el funeral de Fernando Gómez-Acebo, que fallecía de forma prematura a los 49 años, fueron muchos los rostros que quisieron acompañar a la familia real en el último adiós al sobrino del rey emérito. No fue el caso, sin embargo, de la reina Letizia, que del mismo modo que ha hecho ahora, optó por mantenerse alejada del acto.

Su sonada ausencia fue señalada como posible consecuencia de la buena relación entre Fernando y sus hermanos con las infantas Elena y Cristina, razón por la que a pesar de haber compartido grandes momentos juntos durante los primeros años de su matrimonio con Felipe, le habría llevado a romper el vínculo con la familia Gómez-Acebo.