Casi se va a cumplir un año de aquel 5 de febrero en el que se comunicó que el rey Carlos III padecía cáncer a través de un comunicado. Esto sucedió solo una semana después de que el rey fuera sometido a una operación de agrandamiento de próstata, a raíz de la cual se identificó un problema adicional que acabó derivando en dicho diagnóstico. A pesar de todo esto, poco más de dos meses después se anunciaba que el monarca retomaría su actividad, algo con lo que ha sido muy concienzudo, pues no hemos parado de verlo, desde entonces en diferentes actos públicos.

Buckingham Palace ha sido muy discreto respecto a cómo está tratando el rey su enfermedad y lo cierto es que ha reinado el secretismo. Sin embargo, la periodista especializada en casa real Pilar Eyre se ha pronunciado en 'TardeAR' sobre cuál es el estado de salud del monarca británico y no se muestra muy positiva: "Las informaciones que tengo y los detalles que he recabado me indican que el estado de Carlos es bastante grave".

La periodista hace un paralelismo con la claridad con la que la corona británica habla de estado de salud de Kate Middleton, que ha pasado por la misma enfermedad y ella misma informó que su cáncer se encuentra en remisión tras una visita al centro sanitario donde llevó a cabo su tratamiento, algo que no sucede con el suegro de esta. Por el contrario, la periodista afirma que el monarca "en el año 2025 continuará con los tratamientos".

La periodista no escatima en detalles y describe el estado físico en el que se encontraría el monarca en base a las últimas imágenes de este durante su visita a Auschwitz. "Su estado es renqueante, caminaba mal, tiene los ojos enrojecidos, va maquillado en las fotos. Todo el que le rodea habla de que su estado continúa siendo muy grave", apunta. Y a colación de este evento ha dado más detalles en la revista 'Lecturas'. Explica que los médicos le recomendaron que no viajara a Polonia hasta el pasado lunes -mismo día en el que tuvo lugar el homenaje- para conmemorar los 80 años de la liberación de los nazis. La experta incluso ha mencionado que su estado "empeora" diariamente y, que debido a la imprevisibilidad de su enfermedad, "todo puede cambiar de la noche a la mañana". 

La experta ha ido incluso más allá y ha revelado algo que sucedió recientemente: "Aunque no se publican en ningún medio serio, corren rumores que el avance de su cáncer es imparable, hasta el punto de que cuando el otro día le preguntaron en un acto '¿Cómo está?', respondió con amargura, 'todavía vivo'". También ha subrayado el hecho de que será difícil conocer el estado de gravedad en el que se encuentra el rey, si siguiera el ejemplo de su madre, la reina Isabel. Ella que sufrió un cáncer de médula ósea "muy doloroso", según Eyre, estuvo recibiendo en su despacho y siguiendo con su agenda hasta dos días antes de morir. "El sentido del deber que tienen es absolutamente incomprensible", finaliza.

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