La austeridad es la norma que suele regir el vestuario de la reina Camila: su vestimenta en colores neutros y su gusto por los patrones clásicos son los pilares de los looks que le solemos ver. Sin embargo, en una de sus últimas apariciones ha transgredido su propia norma. La reina Camila ha viajado a Middlesbrough (Yorkshire del Norte) para celebrar los logros de National Literacy Trust, una organización benéfica que trabaja con escuelas y comunidades para brindarles a los niños las herramientas y la alfabetización necesaria para tener éxito en la vida. Esta ha sido la ocasión elegida para lucir una joya que nunca antes le habíamos visto, unos pendientes de zafiros valorados en 20.000 euros.

Según ha publicado la propia corona británica en sus redes sociales la reina se unió a 750 niños de 12 escuelas locales, el galardonado Frank Cottrell-Boyce y la autora Nadia Shireen en el escenario antes de presentar a cinco estudiantes con sus certificados de 'Lector de estrellas'. Para esta cita, la reina escogió uno de sus conjuntos habituales, en este caso, protagonizado por un abrigo de paño de color azul marino con cuello subido y detalles bordados en disposición vertical en el delantero que combinó con un vestido en el mismo tono. Adornó el abrigo con un broche en forma de mariposa en uno de los laterales superiores, pero esta no fue la joya que más llamó la atención.

En sus orejas resplandecían unos llamativos pendientes que estrenaba este día, pues antes no se los habíamos visto. Se trata de unos pendientes largos que combinan varias piedras preciosas. Están diseñados con una parte central en forma de corazón con diamantes y un gran zafiro en el centro. Y de esta parte cuelgan en forma de borla varias tiras de pequeños zafiros, haciendo al color azul protagonista de la joya engastada en oro blanco de 18 quilates.

Es una pieza que pertenece a la joyería Fabergé y está a la venta por 20.000 euros en su web. Los pendientes pertenecen a la colección Fabergé Imperial "que combina de forma cautivadora la artesanía impecable con las piedras preciosas más finas, celebra los ritmos de las estaciones. Las excepcionales piezas de diamantes blancos, perlas y piedras preciosas de colores demuestran la extraordinaria artesanía Fabergé", explican desde la joyería. Las piezas también están disponibles sustituyendo los zafiros de los de Camila por esmeraldas y en este caso el precio alcanza los 25.200 euros. Por otro lado, también se pueden comprar diseñados con rubíes, y su precio es 22.800 euros. Por lo que de las tres opciones disponibles la esposa de Carlos III se ha decantado por la más económica.

No se conoce si esta es una pieza que haya adquirido ella misma para aumentar su gran colección de joyas o ha sido un regalo. Y es que la aparición de esta nueva joya coincide con una fecha señalada, pues el pasado 10 de febrero se celebraba el 20 aniversario de su compromiso con el rey Carlos III, por lo que podría ser un obsequio de este para celebrar su amor.

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