La infanta Cristina ha adquirido cierta popularidad desde que se produjo un acercamiento a la Casa Real, esto se hizo más visible cuando llegó a la boda de Victoria López de Quesada y Enrique Moreno de la Cova en el mismo coche que su hermano, el rey Felipe. Ahora siguen trascendiendo detalles de su vida actual. Si hace poco supimos que sigue una dieta muy parecida a la de la reina Sofía y su tía la princesa Irene, ahora se ha sabido que la hermana del rey arrastra cierto trauma que le impide someterse a cirugías estéticas para retrasar los signos del envejecimiento. “Es la herencia de un trauma”, así lo explica la fuente a la que atribuye '¡HOLA!' esta información.

El episodio que todavía está en la memoria de la infanta Cristina ocurrió hace ya décadas, pero ella todavía lo tiene muy presente. En una intervención quirúrgica su abuela la reina Federica, madre de la reina Sofía, sufrió un infarto de miocardio tras someterse a una cirugía plástica ocular en un hospital de Madrid. Este recuerdo ha provocado que evite pasar por quirófano por una cuestión estética y proporcionar a su piel otro tipo de cuidados.

Una amiga de la infanta le ha contado a la citada publicación cómo se plantea la infanta el futuro de su imagen. "Está preparada y quiere envejecer con arrugas, de manera natural. Es la vida", afirma la revista. Además. según afirma el digital mencionado, esto no significa que Cristina no cuide su imagen, sino que sustituye estos procedimientos por otros: "Recurre a tratamientos no invasivos, vitaminas y suplementos para combatir los efectos el envejecimiento, pero hasta ahí".

Y es que afortunadamente, la medicina estética ha evolucionado mucho en los últimos años y cada vez existen procedimientos con resultados efectivos y menos invasivos. Desde la nutricosmética que ayuda a mejorar el estado de nuestra piel desde dentro, hasta tratamientos inyectables con los que se suprimen técnicas necesarias en el paso por quirófano como la anestesia general. Otra de las ventajas de estas nuevas prácticas es que la recuperación es mucho más rápida.

Lo que sí se decidió a hacer hace casi tres años es eliminar uno de los rasgos más característicos de su rostro, extirpando la verruga alunarada que tenía sobre el labio superior. Fue en un acto de la Fundación La Caixa, en 2022, cuando la hermana del rey se le vio por primera vez si este signo identificativo de su rostro.

En los últimos años, además de esto, se ha podido observar una evolución en la forma de vestir de la infanta, siendo fiel a diseñadores que le acompañan desde hace años, como Lorenzo Caprile. En la boda de José Luis Martínez Almeida y Teresa Urquijo, la infanta demostró que está muy al tanto de las tendencias luciendo un dos piezas diseñado en un tejido muy fluido, de color marrón chocolate. Un conjunto que alabó la prensa especializada por su buen gusto.

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