Desde que se convirtieran en padres, Kate Middleton y el príncipe Guillermo han tratado de proteger al máximo la intimidad de sus hijos y son pocos los datos que han trascendido sobre la vida privada de los tres menores, los príncipes George y Louis, que acaba de cumplir 7 años, y la princesa Charlotte. Salvo aquellos actos a los que deben acudir al ser miembros de la Casa Real, los tres niños llevan una vida alejada del ojo público.

Sus padres se han encargado de que no trasciendan datos sobre sus hijos, a los que en el último año y medio, desde que a la princesa de Gales le diagnosticaran cáncer, han priorizado. Fue la propia Kate la que, en el comunicado que hizo tras finalizar su tratamiento, dejó claro que los tres niños son su prioridad y la de su marido. Ambos se han centrado en "lo que verdaderamente importa" y así lo seguirán haciendo.

Sin embargo, pese a ese hermetismo en torno a su parcela más privada, los príncipes de Gales no han podido impedir que una antigua trabajadora haya hecho públicos algunos datos sobre la vida de sus hijos. Ha sido Caroline Redgrave, quien fuera niñera de los pequeños durante cinco años, quien ha concedido una entrevista al diario británico 'The Sun' y ha abierto una puerta a la intimidad de los príncipes de Gales y sus hijos.

Caroline Redgrave, que estuvo al cuidado de los tres menores durante algo más de cinco años, se ha sincerado sobre la vida en palacio y sobre cómo eran sus rutinas nocturnas y las normas que los príncipes de Gales han establecido. Según ha explicado la exniñera en la citada entrevista, el momento previo a irse a la cama era el momento en que ponían en práctica una rutina relajante para los tres menores. "Siempre mantuvimos una estructura familiar: un baño tibio, juegos tranquilos, cuentos y luego a la cama. Fue diseñado para ayudarlos a relajarse lentamente. La rutina era siempre la misma, sin importar lo que hubiera sucedido durante el día", ha comentado Redgrave.

Y era precisamente en ese momento cuando la niñera pudo conocer en profundidad a los pequeños, a los que ha dedicado una preciosas palabras. "Los conoces en esas tranquilas horas de la noche. Es cuando están más relajados. Y es también cuando ves cómo son: educados, juguetones y llenos de personalidad".

En cuanto a los pasos que componen esa rutina, el baño era "parte no negociable del proceso". Además, "nunca usan productos agresivos ni nada con fragancias fuertes". Para la higiene de sus hijos, los príncipes de gales se han decantado por productos naturales. "Sus rutinas para la piel eran realmente sencillas, muy naturales. Sin químicos ni complicaciones. Solo agua tibia, un paño suave y jabón vegetal".

Otra de las importantes normas que han establecido Kate Middleton y el príncipe Guillermo es prohibir el uso de dispositivos electrónicos. "No había tiempo para ver pantallas por las noches porque se trataba de bajar el ritmo", ha explicado la exniñera Carole Redgrave, qué ha revelado también las preferencias de los tres niños antes de irse a dormir. "A George le gustaba construir con bloques después de bañarse, mientras que Charlotte prefería leer tranquilamente y Louis a menudo se acurrucaba con un juguete de peluche",

Por último, una hora antes de apagar las luces, los pequeños "tomaban una taza de leche tibia, nunca fría, y, a veces, una rodaja de banana o la mitad de un pastel de arroz". Además, en esos momentos previos también se dedicaba un rato para estar en familia y las muestras de cariño. "Había abrazos, libros, alguna que otra risita. Era maravillosamente normal", ha relatado la niñera en esta entrevista que ha abierto la puerta a la intimidad de los príncipes de Gales y sus hijos.

Suscríbete a la newsletter de Divinity y recibirás toda la información de celebrities y corazón cada semana en tu mail