Parece que el 12 de octubre, junto con el desfile de la Hispanidad y el posterior besamanos, la Familia Real estuvo más liada de la cuenta. Además de para inmortalizar esta felicitación navideña, Zarzuela también escogió esta fecha (y estos estilismos) para el primer posado oficial de la Princesa Leonor. ¡Eso es ahorrar en fotógrafos y lo demás son tonterías!
Si la Navidad tiene un color, ese es el rojo. Y los Reyes se han tomado eso a rajatabla. Detalles como la corbata de Felipe VI, el traje estampado de Sofía o el vestido pasión de Leonor lo demuestran. ¿Cómo no pudimos caer el Día de la Hispanidad que, con tanto burdeos, Casa Real nos estaba dando la bienvenida a la Navidad antes de los esperado? El único que pasó por vestuario fue el Rey, que sustituyó el uniforme militar por el tradicional traje-corbata.
Al contrario de otros años, donde ha primado la naturalidad, esta vez han apostado por un posado mucho más institucional. Eso se ve especialmente en la elegancia de Doña Letizia, con un dos piezas gris, un recogido impoluto y un broche de perlas. La reina, más royal que nunca.
En lugar de en Zarzuela, esta vez han decidido tomar la fotografía desde uno de los balcones del Palacio Real. Aunque por la perspectiva de la imagen parece un fake en toda regla, digno de un buen montaje de Photoshop, se trata de un plano que da al patio interior desde las habitaciones privadas de Alfonso XIII y Victoria Eugenia.
Por último, y en contraste con la rigurosidad de sus padres, la Princesa Leonor demuestra una vez más que es presumida al lucir en primer plano una pulsera en tonos azules que, si volvemos al posado de su cumpleaños, se preocupó en que nadie viésemos tapándola con la mano izquierda.