De alquiler y redecorado: así es el piso de 43 metros en el que vive Inés Hernand

Inés Hernández, conocida por todos como Inés Hernand, se ha convertido en la referente de moda para todos los pertenecientes a la generación Z. En apenas un par de años ha pasado de ser conocida por lo videos en los que acompañaba a su mejor amiga, la youtuber Andrea Compton, a una de las comunicadoras más queridas de nuestro país.

Entre los podcasts que encabeza, sus participaciones como colaboradora y presentadora en diferentes programas de televisión y su trabajo como influencer a tiempo completo, la madrileña ha logrado sacar un hueco para conducir por segundo año consecutivo el festival del que saldrá el próximo representante de España en Eurovisión, el Benidorm Fest. Y en estos meses en los que el teléfono no ha dejado de sonar, la también deejay ha logrado sacar tiempo para buscar el que ya es su nuevo hogar.

Hace años que la presentadora se emancipó y comenzó a vivir en un piso compartido junto a su amiga y la hermana de esta. Desde allí, la presentadora logró encauzar su carrera como comunicadora, sin embargo, hace tan solo unos meses Inés decidió "independizarse de su mejor amiga" y buscó un lugar al que poder llamar su propio hogar. Lo que encontró la madrileña fue un pequeño piso de 43 metros cuadrados que ha alquilado y decorado completamente a su gusto.

La creadora de contenido compartió con las más de 450 mil "santinas", como ella llama a sus seguidores, un divertido 'house tour' de su nueva casa, empezando por la puerta de madera antigua que nos recibe según entramos al piso. Al entrar, tal y como puedes ver en el vídeo que abre esta noticia, se puede ver que los suelos que recorren toda la casa son de parqué en tonos madera y las paredes están pintadas de blanco, a juego con las puertas del resto de las estancias.

Del piso se puede intuir que es antiguo, pues mantiene las molduras en los techos, y los grandes ventanales de algunas de las habitaciones cuentan con unas persianas mallorquinas también blancas a modo de persiana. Sin embargo, la disposición y la decoración que Hernand ha escogido lo hace bastante moderno y funcional.

A sendos lados de la entrada se encuentran dos habitaciones, una de ellas el cuarto de la joven. Un pequeño espacio que Hernand ha querido sacar el máximo provecho. El objeto principal de la estancia es una gran cama de matrimonio situada junto a la pared y a la ventana que permite que entre mucha luz al dormitorio. Está vestida con una colcha verde menta, a juego con parte de la pared lateral, que está pintada hasta más de la mitad de ese mismo tono y hasta el techo de un blanco roto. El cabecero de la cama es de un material que simula la madera, muy parecido al mimbre, y combina a la perfección con la lampara/ ventilador que cuelga del techo y cuyas aspas también son en tonos madera claros.

Además, el cesto de mimbre que hay colocado a los pies de la cama y el marco del espejo que cuelga de manera horizontal en la pared, también son de dicho color. En cuanto al resto de la habitación, un gran armario empotrado con puertas lacadas en un blanco impoluto compone otra de las paredes del pequeño dormitorio.

Además del dormitorio principal, el piso cuenta con otro pequeño espacio que la influencer ha convertido en su vestidor particular. Una estancia estrecha donde predominan los tonos grises y beige. Mientras que la pared principal está conformada por cuatro grandes armarios beige con los tiradores en negro mate, la frontal está ocupada por un modesto tocador en tonos gris perla y una cómoda alta del mismo color, todo ello encabezado por un gran espejo tipo camerino. Por último un sillón de tela gris con las patas en negro que combina a la perfección con el espejo de cuerpo entero que hay colgado tras la puerta de la estancia.

En cuanto al salón-comedor del piso, es la estancia más espaciosa de la casa y la pared en forma de arco por el que se accede a él proporciona una sensación de mayor amplitud. En esta habitaciónm Ubñes ha seguido combinando la mezcla de colores para las paredes. Mientras que la zona de descanso correspondiente al salón tiene a su espalda una pared en tonos blancos, la zona de comedor está pintada con una tonalidad azul cielo.

En dicha estancia de nuevo un ventanal de suelo a techo permite que la luz natural inunde la habitación. En el lado del salón, un sofá de tonos grises en forma de ele ocupa la mayor parte del espacio. Junto a él, una moderna mesita baja en tonos rojos claros está repleta de libros y revistas, además de algún objeto de decoración gracioso.

En la zona del comedor, de la pared cuelga una gran estantería plagada de libros que dan a la estancia un aspecto más acogedor. En el centro del espacio, ha colocado una mesa redonda entonos madera a juego con la cómoda que hay a pocos centímetros. Y del techo cuelga una lámpara de diseño en tonos rojizos que combina a la perfección con la pequeña mesita color coral del salón.