Aunque a veces no le prestamos mucha atención, el baño es una de las estancias más importantes de la casa y tiene infinitas posibilidades de diseño. La elección de plantas, muebles, lámparas o espejos puede cambiar por completo la sensación que tengamos al entrar en él. No te pierdas estas ideas para decorar tu baño con estilo y convertirlo en una de las habitaciones más especiales de tu hogar. 

No hace falta recargar el baño para que quede elegante. Si eres partidaria del menos es más, confía en una decoración minimal, incluyendo los sanitarios y lavabos. 

Los azulejos en colores especiales, como verde, azul, rosa… se bastan por sí mismos para darle un nuevo aire a tu baño y convertirlo en uno de lo más especial. 

Las piezas de diseño son un gran acierto, y a veces solo es necesario dar con una para transformar por completo una estancia. Es lo que ocurre con este lavabo, que capta toda la atención del baño, aportando originalidad y estilo.

Este baño tan chic de estilo nórdico es tan ideal que queremos copiar todos los detalles que vemos. La clave principal es aportar por el blanco en azulejos, suelo y muebles. La longitud del espejo consigue que el baño se vea más grande, y es un gran acierto el toque dorado del marco.

Si te gustan las decoraciones excesivas no tienes por qué renunciar a ellas ni en el baño. Mira este diseño que combina ladrillo, madera, papel pintado, elementos de inspiración industrial con otros más chic, y el resultado no puede ser más divino.

La estética vintage es una de las tendencias que más se llevan en el hogar, y si no sabes cómo aplicarla en tu baño, toma nota de este impresionante diseño que se decanta por un espejo antiguo, molduras en las paredes y un lavabo clásico espectacular, por no hablar del detalle de las cortinas. 

Apostar por la madera es siempre un gran acierto, también en el baño. Es elegante y aporta una calidez excepcional, ideal para esta estancia de la casa. Además, el acabado es muy sencillo, para quienes no buscan algo recargado. 

El combo de colores más elegante y sofisticado triunfa también en el cuarto de baño. Tú decides en qué proporción los incorporas, pero si buscas un acabado luminoso, dale prioridad al blanco.

Abrir la ducha, prescindiendo de mamparas y cortinas, es una de las opciones más demandadas en el diseño de baños. Las principales ventajas son la comodidad y la sensación de amplitud, además de que estéticamente queda de maravilla.

El papel pintado te permite cambiar el diseño de tu baño de manera sencilla con tanta frecuencia como quieras. Puedes usarlo en el baño principal, pero si te resulta excesivo, prueba con el baño de invitados e impresiona a tus visitas. 

Si las dimensiones de tu baño lo permiten, la opción de lavabos separados es cómoda y sofisticada, aportando un aire señorial a la habitación sensacional. Si además separas los espejos y das un toque de color, el resultado es espectacular. 

¿No te decides entre un diseño clásico y uno moderno? Pues apuesta por ambos. Este baño combina a la perfección elementos de diseño industrial, como la ducha, con un lavabo y espejo de corte clásico. 

Sabemos que la ducha es muy práctica, pero pocos placeres se asemejan al de sumergirse en una bañera. Si no puedes prescindir de ella, elige una que sea externa y de diseño tradicional. 

La inspiración nórdica también nos invita a reducir los muebles y a dejar los elementos del baño a la vista. Si consigues que tus toallas estén perfectamente dobladas y no tienes una infinidad de productos de aseo, es una opción ideal. 

Nos encanta la propuesta de utilizar elementos decorativos inesperados en el baño que podrían pertenecer a otra estancia de la casa, como el salón. La lámpara de mimbre o los cuadros sobre la bañera convierten este baño en un lugar en el que podrías pasar horas y horas.