La casa de Romina Belluscio y Guti, a las afueras de Madrid, es una espectacular mansión ubicada en una de las urbanizaciones más exclusivas de la capital. La pareja vive junto a sus hijos, Enzo y Romeo, en La Finca, en Pozuelo de Alarcón, donde además de contar con más de 1.000 metros cuadrados para su impresionante vivienda, disfrutan de la seguridad y discreción que buscaban. La urbanización está protegida por una muralla de piedra que impide la visión desde el exterior y tiene un servicio de vigilancia 24 horas. Pero gracias a las redes sociales, hemos podido descubrir qué se esconde tras esos muros y cómo es la preciosa casa del futbolista y su familia.

La espectacular vivienda de la pareja está dividida en dos plantas y un sótano. En la planta superior se encuentran los dormitorios, un estudio y una biblioteca con vistas; en la planta baja están las estancias comunes, como la salón, la cocina y el comedor. El sótano está distribuido en una zona de ocio, un gimnasio y el parking de la casa. Uno de los aspectos que más destacan de la casa es la luz que entra por los ventanales y que ilumina las amplias estancias, incluso en el sótano.

La casa y sus dimensiones son dignas de mención, pero sin duda el punto fuerte de la propiedad es el gran jardín de césped natural que rodea la vivienda. Este espacio al aire libre finaliza con un gran muro de piedra maciza que queda cubierto con una formación de plantas y arbustos. En el jardín tienen distintos espacios para disfrutar en familia, algunos de ellos con estética chill-out y con detalles tan especiales como una chimenea al aire libre. 

Romina Belluscio ha confesado en redes que la piscina de la casa es su gran debilidad y que la han acondicionado hasta tenerla tal y como ella quería. Se encuentra en el centro del jardín, es de forma rectangular y cuenta con una cascada en el borde que hace que parezca un enorme spa al aire libre. Junto a la piscina hay un porche en el que disfrutar antes y después del baño, además de una zona de solárium. 

Sin duda se trata de uno de los rincones más especiales de la casa. Romina y Guti han reservado una zona de la propiedad para tener su propio huerto y criar gallinas, que les proveen de verdura y huevos de la forma más natural. Para la pareja llevar una vida saludable es muy importante, algo que se nota en el gran uso que le dan al gimnasio. Y la alimentación no iba a ser menos, por lo que están encantados con llevar parte de la comida del huerto a la mesa.